En los últimos meses, especialmente a lo largo del verano, la Guardia Civil ha detectado un incremento de nuevos métodos de robo en las carreteras. Se trata de modus operandi muy sofisticados y difíciles de detectar que sirven para robar en el interior de los coches, pero también los propios vehículos. Entre los más buscados por los ladrones hay el Seat Ibiza, el Seat León y el Volkswagen Golf, ya que las piezas de estos coches son las más buscadas en los circuitos de venta ilegal de recambios.
Nuevos métodos para robar coches en las carreteras
Que se haya detectado un incremento de robos de coches en verano es muy normal, puesto que los ladrones aprovechan esta época en que hay mucho más movimiento de vehículos y lo tienen más fácil. Al acabar la etapa estival, la Guardia Civil ha querido hacer público a cuáles son los métodos más utilizados por los delincuentes que se dedican a este tipo de robos.
Entre estos está el "método del peaje", también conocido como "peaje fantasma". En este modus operandi, cuando la víctima se detiene en un peaje para pagar, el coche de los ladrones se detiene detrás de él, muy cerca. El copiloto aprovecha para bajar disimuladamente cuando la víctima está distraída y se aproxima a su coche para reventarle una rueda. Posteriormente, cuando se tiene que detener para arreglar la rueda, se ofrecen para ayudarlo y lo acaban robando.
También se utiliza mucho el fraude de la grúa pirata. En esta ocasión, los ladrones no provocan el problema en el coche, pero sí que se colocan en puntos estratégicos con una grúa a la espera de que algún vehículo se detenga con una avería. Entonces, mientras no llega la grúa real, ofrecen su ayuda a cambio de un dinero. Incluso, en caso de que la víctima acepte que se lo lleve al taller mecánico, le acaba robando el coche.
El más sofisticado de los métodos, sin embargo, es el de utilizar material electrónico para hackear el vehículo y anular sistemas de seguridad como alarmas o cámaras de seguridad. En pocos minutos, el coche se encuentra vulnerable y fácil de ser robado. Sin embargo, este método implica mucha más infraestructura por parte de los ladrones, y está pensado más para robar vehículos de alta gama.