Los Mossos d'Esquadra han detenido a un chico de 19 años con 40 antecedentes que en los últimos dos meses había cometido hasta una decena de robos de teléfonos móviles en varios municipios del Barcelonès. El joven actuaba siempre siguiendo el mismo modus operandi. Aunque no disponía de carnet de conducir, había sustraído una motocicleta con la cual circulaba por la vía pública y, sin llegar a detenerse, iba arrancando los teléfonos de las manos a los peatones con un tirón. Posteriormente, escapaba a toda velocidad con el vehículo de dos ruedas sin que la víctima pudiera hacer nada para evitarlo.
Otra persona se encargaba de la venta de los móviles robados
El ladrón, según han podido comprobar los Mossos, habría cometido una decena de robos de esta manera entre el 24 de septiembre y el 26 de noviembre. Después de sustraer los dispositivos, otra persona se encargaba de colocar en el mercado ilícito los móviles sustraídos. Después de meses de trabajo por parte de la Unidad de Investigación de Nou Barris de Barcelona y con todos los indicios recogidos, se montó un dispositivo específico que permitió localizar y detener al autor el pasado 26 de noviembre en la ciudad de Badalona. Además, también se pudo recuperar la moto robada con la cual después cometía los otros robos.
El chico, de quien los Mossos no han querido facilitar la nacionalidad en su habitual exceso de celo, está acusado de ser el presunto autor de varios delitos por robo con violencia y un delito de lesiones leves, hurto de vehículo y receptación. Además, también se le atribuye un delito contra la seguridad del tráfico por conducirla sin disponer de ningún permiso. Por otra parte, al día siguiente de su detención, también se llevó a cabo una entrada y perquisición en el domicilio propiedad del otro investigado, donde se encontró dinero en efectivo y se recuperaron varios indicios relacionados con la investigación.