Regirse por la ley del mínimo esfuerzo puede ser muy peligroso, hasta el punto de que quien lo practica puede llegar a perder cantidades importantes de dinero. Eso es precisamente lo que le pasó a un hombre, residente en Elche (Alicante), que se creyó la oferta de trabajo que le proponía un vecino de Roses (Girona). Sobre el papel, todo parecía maravilloso: podía llegar a ganar unos 90 euros al día solo con el visionado de vídeos o contestando encuestas y dejando reseñas en portales web. Cuando aceptó, el supuesto estafador le pagó los 5 euros que le había prometido a cambio de completar una de estas tareas, con lo que se ganó su confianza.
Le prometen ganar 90 euros al día y acaba pagando más de 2.000
El siguiente paso del estafador fue pedirle los datos personales a la víctima que necesitaba para poder introducirlo en un grupo de trabajo en el cual le propondrían unos 18 trabajos diarios con los que podría cobrar hasta 90 euros al día. Una vez entró en este “grupo de trabajo”, le asignaron un “mentor”, una persona que se encargaba de hacerle llegar estas tareas y quien, con el tiempo, se llegó a ganar su confianza lo suficiente para sugerirle hacer una inversión con la promesa de que obtendría una rentabilidad del 30%. Para eso, la víctima tuvo que ingresar pequeñas cantidades de dinero en una cuenta bancaria hasta que le pidieron invertir 2.260 euros, cantidad que los delincuentes se quedaron íntegramente.
Al darse cuenta de que había sido estafado, el hombre acudió a la Policía Nacional y puso una denuncia, según la cual, una persona había contactado con él por teléfono para ofrecerle estos trabajos, que él aceptó creyendo que era una propuesta verídica, pero que acabó perdiendo más de 2.000 euros. Los investigadores pudieron rastrear la huella digital del supuesto estafador, localizándolo en Roses y procediendo con su detención y posterior puesta a disposición judicial.