Nueve hombres detenidos del entorno de las víctimas de la Font de la Pólvora por asaltar y destrozar viviendas vinculadas al autor del crimen. Los Mossos d'Esquadra han arrestado, entre el 26 de julio y el 1 de agosto, nueve hombres, de entre 34 y 55 años, por delitos de daños, entrada en vivienda ajena y desórdenes públicos en Girona y Figueres. Los hechos se produjeron a raíz del crimen en el barrio de la Font de la Pólvora durante la verbena de Sant Joan, donde un individuo, después de una discusión previa, disparó contra cuatro personas, dos de las cuales murieron, un hombre y una mujer, de 44 y 48 años y de nacionalidad española y de etnia gitana.
Concretamente, como explicó ElCaso.com, un grupo de entre 70 y 100 personas se desplazaron desde Girona, al barrio de la Font de la Pólvora, y atacaron tres pisos, hasta destrozarlos, propiedad de la familia de Guillermo C.H., el principal sospechoso del tiroteo mortal de la verbena de Sant Joan. Pese a ello, los Mossos d'Esquadra y agentes de la Policía Local de Figueres les intentaron detener, dado que querían vengar la muerte de las dos personas, pero no lo consiguieron y finalmente accedieron al barrio y llegaron hasta las viviendas, que asaltaron.
Disturbios y refuerzos policiales en los barrios de Girona
De hecho, tal como avanzó este medio, en el momento que se tuvo conocimiento de la salida del grupo de personas desde Girona y que iban hacia el barrio de Culubret, una zona de control de familias de etnia gitana, se activaron recursos de orden público de los Mossos d'Esquadra, que hicieron llegar a Figueres equipos del ARRO y de la Brimo. Sin embargo, decidieron no actuar y dejar hacer. Lo cual resultó en el asalto de las viviendas propiedad del principal sospechoso del asesinato a tiros durante la verbena de Sant Joan en el barrio gerundense de la Font de la Pólvora.
Aun así, los Mossos d'Esquadra mantienen abierta la investigación para localizar a los autores del crimen y continúa el dispositivo especial policial con efectivos de orden público en el barrio gerundense donde sucedieron los hechos. Estos efectivos de la policía catalana en el barrio de la Font de la Pólvora continuarán unos días más después del tiroteo, donde se utilizó un arma de guerra, estilo AK-47, y también un arma corta, de 9 mm. En parte, según confirmó ElCaso.com, los Mossos d'Esquadra tienen miedo de que los incidentes del barrio de Girona se puedan repetir en otros lugares de la ciudad, por lo que también desplegaron un equipo de orden público en el barrio de Germans Sàbat, otro punto de la capital gerundense donde también hay miembros del colectivo de etnia gitana y donde viven familiares de los dos clanes enfrentados desde la verbena de Sant Joan.
Incidentes en el Hospital Josep Trueta de Girona
La misma noche del crimen, donde fueron asesinados un hombre y una mujer y dos personas más resultaron heridas de gravedad, se produjeron disturbios en el Hospital Josep Trueta de Girona. Unas 150 personas que eran familiares, amigos y vecinos de las víctimas, que estaban siendo atendidas en el servicio de urgencias, irrumpieron violentamente dentro del centro hospitalario rompiendo la línea policial de los Mossos d'Esquadra. Es habitual, no obstante, que los clanes familiares de la zona, cuando hay incidentes y tienen personas heridas, intenten acceder, si hace falta a la fuerza, a los centros médicos.
En cualquier caso, las personas vinculadas a las víctimas golpearon, empujaron y agredieron a los agentes que formaban un cordón para garantizar la seguridad de los trabajadores y usuarios del centro. Dos policías resultaron heridos leves en este ataque y detuvieron a dos personas de 37 y 53 años por atentado contra agentes de la autoridad. A primera hora de la mañana del día siguiente, día 24 de junio, es cuando se produjo el acto de venganza por los crímenes, en el domicilio del supuesto autor de los hechos y en dos viviendas más. Por ello, han sido arrestados nueve hombres, todos con antecedentes policiales, y han pasado a disposición del Juzgado de Instrucción en funciones de guardia de Girona.