Cada día, en algún lugar de Catalunya, los Mossos d'Esquadra desmontan una plantación de marihuana. Este jueves, a primera hora de la mañana, con equipos del ARRO de la región central, tras una investigación de la Unidad de Investigación de Vic, se entró en una casa de tres plantas de Espinelves (Girona) que estaba llena de marihuana. En las tres plantas había plantas, muchas, en un avanzado estado de crecimiento, según han explicado fuentes policiales a ElCaso.com.

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Plantación de marihuana de Espinelves (Girona) / Cedida

Los agentes del ARRO de los Mossos asaltaron la casa y pudieron detener a dos hombres, de 29 y 35 años, acusados de un delito de defraudación de fluido eléctrico y un delito contra la salud pública. En total, según las primeras informaciones, se localizaron 500 plantas de marihuana, repartidas por las diferentes estancias del narcochalé. Los dos arrestados, que hacía un mes que habían sido detectados, serán entregados al juzgado de guardia, que decidirá si quedan en libertad o si tienen que ingresar, contra pronóstico, en prisión. La investigación de los agentes de la comisaría de Vic sigue en marcha para aclarar quién había detrás de esta plantación de marihuana y el papel de los dos arrestados, si eran solo los jardineros, como aseguran, o si tenían algún papel más relevante en la organización de esta plantación.

Más marihuana, por todas partes

Las plantaciones se acumulan en las mesas de las unidades de investigación de los Mossos. No hay suficientes días durante la semana para poder investigar y desmantelar todas las plantaciones de esta droga que hay por todo el país y que han convertido a Catalunya en el jardín de Europa. También cuesta encontrar "tanda" para conseguir que las unidades de intervención, sea el ARRO, la Brimo o el Grupo Especial de Intervención (GEI), puedan dar seguridad a los investigadores para hacer los asaltos. Tienen más demanda que capacidad de dar respuesta a todas las entradas judiciales y registros que se realizan.

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Plantación de marihuana de Espinelves (Girona) / Cedida

Sin ir más lejos, ayer se supo también que se había desmontado una plantación en Valls, en Tarragona, y también, el miércoles, en Lleida. En una nave de la capital del Segrià detuvieron a tres hombres, rumanos, de 51, 40 y 23 años, como presuntos autores de un delito contra la salud pública y un delito de defraudación de fluido eléctrico. Las detenciones fueron el resultado de una investigación abierta el pasado mes de abril después de tener indicios de la existencia de una nave en desuso en Lleida que podía esconder un cultivo de marihuana. Con esta información, los agentes localizaron y ubicaron la nave en el polígono industrial Els Frares de Lleida. También encontraron 500 plantas, como en el narcochalé de Espinelves.