Un motorista ha perdido la vida este sábado en un nuevo accidente mortal en las carreteras de Catalunya. Los hechos se han producido cuando pasaban pocos minutos de la una menos cuarto del mediodía en el punto kilométrico 27 de la T-702, a la altura del término municipal de Cabacés, en el Priorat (Tarragona). Por causas que a estas alturas se desconocen y se están investigando, el motorista se ha caído a la vía y después se ha precipitado por un talud. Al recibir aviso del siniestro, se han activado dos patrullas de los Mossos d'Esquadra, dos dotaciones de los Bombers de la Generalitat y un helicóptero medicalizado del Sistema d'Emergències Mèdiques (SEM).

Al llegar al lugar de los hechos, los servicios sanitarios han atendido al hombre y lo han intentado trasladar de urgencia al hospital en el helicóptero, pero ya no se ha podido hacer nada para salvarle la vida y se ha acabado decretando su muerte antes de llegar al centro hospitalario. Se trata de un vecino de Canyelles de 59 años. Los trabajos de los equipos de emergencias han obligado a cortar completamente la carretera en este punto. Agentes del Área Regional de Tráfico se han hecho cargo de la investigación con el fin de aclarar las causas del siniestro que le ha acabado costando la vida al motorista.

Tercer accidente mortal en menos de 48 horas

Con esta víctima ya son 36 las personas que han perdido la vida en las carreteras catalanas desde que empezó el año, según los datos provisionales del Servei Català de Trànsit, de los cuales once han sido motoristas. El accidente mortal de Cabacés es el tercer siniestro mortal que se registra en las carreteras de Catalunya en menos de 48 horas. El jueves por la noche, minutos antes de las ocho y media, una vecina de Manresa de 45 años murió al ser atropellada por dos turismos después de irrumpir en la calzada de la carretera C-16c, en Sant Fruitós de Bages. Pocas horas más tarde, minutos antes de las seis y media de la mañana del viernes, un chico de 19 años, vecino de la Riba, murió atropellado por un camión cuando caminaba por el arcén de la N-240, en Lleida.