Un hombre de unos 70 años ha muerto ahogado este viernes mientras se estaba bañando en la playa del Canyadell d'Altafulla, en el límite con el término municipal de Torredembarra. Hacia las dos menos cuarto de la tarde, la pareja de la víctima ha llamado al teléfono de emergencias 112 explicando que su marido había entrado al agua a nadar y lo había perdido de vista. Se ha montado un dispositivo con el fin de localizarlo y se han desplazado hasta el lugar efectivos de la Policía Local de Altafulla, la Policía Local de Torredembarra, los Mossos d'Esquadra, la Guardia Civil, Salvamento Marítimo y los Bombers de la Generalitat.

Poco después de las dos de la tarde, testigos han llamado al 112 alertando que se veía un cuerpo flotando en el agua y la embarcación de Salvamento Marítimo lo ha podido avistar a unos 50 metros de la costa. Dos efectivos de los Bombers han entrado en el agua para recuperar a la persona desde la barca del servicio de salvamento, pero el mal estado del mar y el fuerte oleaje que había en este punto de la Costa Daurada ha impedido la maniobra. Por este motivo, el binomio ha optado por asegurar a la víctima y llevarla nadando hasta la playa, donde estaba el personal de socorrismo.

Ya en la arena, se le han estado practicando maniobras de reanimación durante 20 minutos, pero los sanitarios del Sistema d'Emergències Mèdiques (SEM) ya no han podido hacer nada para salvar su vida y se han limitado a certificar su muerte. Se ha activado el servicio de soporte psicológico para asistir a la pareja de la víctima. Los Mossos ya han abierto una investigación para determinar las circunstancias exactas de la muerte y se está a la espera de los resultados de la autopsia. La principal hipótesis es que habría sufrido algún problema de salud cuando estaba nadando y el fuerte oleaje lo ha arrastrado.

Investigan la aparición de un cadáver flotando en el agua en la playa de Segur de Calafell

Por su parte, la Guardia Civil investiga la aparición del cadáver de un hombre de unos 50 años que este jueves apareció flotando en el agua en la playa de Segur de Calafell, en el Baix Penedès (Tarragona). La víctima, que se calcula que hacía menos de 24 horas que estaba en el mar, iba totalmente vestida y tenía toda la cabeza llena de sangre fruto de una herida. El cuerpo fue trasladado al anatómico forense a fin de que se le practique la autopsia y se determinen las causas exactas de la muerte. La principal hipótesis a estas alturas es que se podría tratar de una muerte por ahogamiento y que el golpe en la cabeza se habría producido contra las rocas, ya que el cuerpo apareció muy cerca del puerto deportivo. Sin embargo, se está a la espera del informe forense para aclarar si se trata de una muerte criminal, de un accidente o de un suicidio.

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