Los Mossos d'Esquadra han localizado en Santa Coloma de Gramenet, viviendo en esta ciudad, a un hombre que estaba en busca y captura desde hacía cinco años por las autoridades de Pakistán. Se trata de un hombre que tiene pendientes más de veinte delitos en aquel país, tres de ellos por asesinato, varios más por intentos de homicidio y también delitos supuestamente relacionados con el terrorismo, según han detallado fuentes oficiales pakistaníes. El hombre, que también estaba en busca y captura por la Interpol, es Nawazish Ali Hanjra, de 31 años, de nacionalidad pakistaní, y que ahora, tras ser entregado a la Audiencia Nacional española el pasado 27 de junio, viernes pasado, deberá ser extraditado a su país.
La detención se ha realizado por una investigación del recientemente creado Grupo de Investigación Internacional de Fugitivos (GRIF), que forma parte de la Unidad de Entorno Penitenciario de la Comisaría General de Investigación Criminal, y que se dedica a buscar personas huidas de la justicia en el ámbito internacional, ya sea por órdenes de otros países, vehiculadas por agencias extranjeras como la Interpol, como en este caso, o también cuando prófugos catalanes de la justicia o de la policía se sospecha que han cruzado nuestras fronteras y que buscan esconderse fuera del Estado para evitar ser detenidos.
Desde el año 2020 este hombre tenía pendiente una orden de detención por parte de las autoridades pakistaníes, y se tenía diversa información de que podría estar escondido en Santa Coloma de Gramenet. Tras esperas y vigilancias en la zona donde se creía que podía estar escondido, el pasado 26 de junio, jueves pasado, cuando salía de su casa alrededor del mediodía, junto con otro hombre, los agentes del GRIF lo identificaron y lo pudieron arrestar. La información para localizarlo ha llegado por parte de la policía pakistaní, que tiene a varios de sus fugitivos localizados en el Estado.
Pakistán presume de la detención
Según la información policial compartida por la Interpol, a través de su sistema de alertas rojas de personas fugitivas de la justicia, el detenido en Santa Coloma de Gramenet está relacionado con más de veinte casos. Se le busca por tres asesinatos, cuatro delitos de tentativa de asesinato, once delitos contra la Ley Antiterrorista de Pakistán y cuatro más por extorsión y amenazas de muerte. Esta detención, según Pakistán, llega tras la presión del Ministerio del Interior al ministro Marlaska para detener a personas que estaban localizadas en el Estado con el fin de ser entregadas a su país. La detención de este supuesto asesino y terrorista se ha vendido, desde Pakistán, como una concesión de España a Pakistán tras la exigencia del ministro Tallal Chaudhry al ministro español. Islamabad lo enmarca como un éxito de la cooperación bilateral y recuerda a España que tienen identificadas más personas fugadas de su país que, supuestamente, se esconden en el nuestro.