L'Àrea d'Investigació Criminal de la Regió Policial de l'Alt Pirineu i Aran dels Mossos d'Esquadra investigan la muerte de un recién nacido como homicidio. Los hechos ocurrieron el mes de marzo de 2025, cuando los agentes de la policía catalana tuvieron una intervención en la que un bebé, que acababa de nacer, había fallecido. Tal como obliga el protocolo, los agentes realizaron diligencias y comunicaron el deceso al Juzgado de Instrucción de La Seu d'Urgell. En aquel momento no se produjo ninguna detención y ahora, el magistrado que lleva el caso ha ordenado investigar el deceso del recién nacido. Los Mossos tienen la investigación abierta y no descartan ninguna hipótesis. Según avanza el Diari Segre, la madre del bebé es una chica muy joven que no informó en ningún momento que estaba embarazada hasta que dio a luz. Ahora, la policía catalana trabaja para saber las circunstancias de la muerte del bebé o si, por el contrario, ya nació muerto.
Hasta 15 años de prisión
En caso de que se confirmara la muerte por causas no naturales, los Mossos d'Esquadra deberán buscar al responsable de la muerte del recién nacido e imputarle como responsable. Según el artículo 138 del Código Penal, matar a otra persona es un delito de homicidio, y prevé una pena de prisión de 10 a 15 años. Este castigo podría verse incrementado en caso de que haya agravantes, como la alevosía o el hecho de que la víctima no se pudiera defender.
La policía catalana tampoco descarta que el deceso del bebé fuera causado por una imprudencia, es decir, que el responsable de la muerte no tenía intención de matarlo. El Código Penal también contempla esta posibilidad, en el artículo 142, y la pena de prisión podría ser menor que en el caso de un homicidio.