Una herida y un basurero perspicaz permitieron detener a un ladrón pocos minutos después de cometer un robo con violencia en L'Hospitalet de Llobregat. Los hechos se remontan al pasado 10 de abril, unos veinte minutos antes de las once de la mañana, cuando el ahora detenido, un hombre de 31 años y nacionalidad marroquí asaltó a una anciana de 80 años en el portal de su casa con la intención de llevarse la cadena de oro que llevaba en el cuello. El delincuente, con cuatro antecedentes por delitos parecidos, muy cometidos en este municipio del Barcelona, no contó con el hecho de que la mujer se resistiría al ataque: cuando le tapó la boca para evitar que gritara, la víctima le clavó un mordisco que le dejó una herida sangrante que, posteriormente, lo delató delante de la policía catalana, según ha podido saber ElCaso.com.

 

Como decíamos, alrededor de las once de la mañana del jueves de la semana pasada, este ladrón especializado en robar cadenas de oro encontró a una nueva potencial víctima, una vecina de edad avanzada, quien justo llegaba a casa y estaba a punto de entrar por el portal. Antes de que lo pudiera hacer, sin embargo, el hombre se abalanzó sobre ella y acabó arrancándole la cadena del cuello y también uno de los pendientes después de que la señora se defendiera con el mordisco. Antes de huir, el hombre la empujó con fuerza y la hizo caer al suelo, dejándola herida leve.

Se cambia la ropa delante de un basurero y eso lo lleva a la detención

Algunos vecinos que pasaban por la zona vieron a la señora en el suelo y acudieron en su ayuda. Cuando les explicó lo que acababa de pasar, llamaron a los Mossos d'Esquadra que no tardaron en llegar con una patrulla. Gracias a la descripción facilitada por la víctima, así como al visionado de las imágenes de las cámaras de seguridad de la finca, a las que ha tenido acceso ElCaso.com, pudieron identificar parcialmente al violento ladrón y pusieron en marcha un dispositivo de búsqueda por la zona para poder encontrarlo.

Mientras tanto, un basurero se acercó a los policías para decirles que acababa de ver a una persona bastante sospechosa cambiándose la parte de arriba en plena calle. Cuando describió al individuo, los Mossos comprobaron que coincidía con la que ya tenían y concentraron sus esfuerzos en buscarlo en la dirección hacia donde el trabajador municipal había visto que se marchaba. Pocos minutos más tarde, lo localizaron en la carretera de Esplugues; cuando detectó la presencia policial, el hombre empezó a caminar más deprisa, según han informado fuentes policiales en ElCaso.com, hasta que lo pararon.

Desgraciadamente, durante el registro de su mochila no pudieron recuperar las joyas sustraídas, que muy seguramente tiró mientras intentaba eludir a los policías. Pero sí que encontraron una sudadera de color rojo, que era la misma que salía en las imágenes de videovigilancias. Por otra parte, tenía una herida en una de las manos e intentaba parar la hemorrágia con un pañuelo. Con todos estos indicios, lo detuvieron por un delito de robo con violencia y otro de lesiones. A estas alturas, el ladrón multirreincidente ya ha ingresado en la cárcel.