Vanessa Bryant, la mujer y ahora viuda de Kobe Bryant, estrella de la NBA cuya trágica muerte supuso un duro reverso para el mundo del baloncesto, acaba de ganar el juicio que inició en octubre del año 2021 contra los servicios de emergencias y cuerpos policiales. Los encargados de atender la escena del siniestro aéreo en el que murieron Bryant, su hija Gianna Bryant, de 13 años, y seis amigos más de la familia, difundieron unas macabras fotografías de los cadáveres de su marido, la pequeña Gianna y los seis amigos que viajaban con ellos aquel fatídico 26 de enero del 2020. Ahora, un juez ha condenado a los acusados a reparar los daños causados a la familia Bryant con una millonaria indemnización que no ha dejado a nadie indiferente.
Los acusados, agentes de la policía y bomberos de Los Ángeles, compartieron "imágenes muy gráficas" de Kobe Bryant con distintas personas para "impresionarlas"
La viuda de Kobe Bryant interpuso una demanda judicial contra los agentes del sheriff de Los Ángeles, así como contra los bomberos del estado, que se desplazaron hasta el punto donde el helicóptero de su marido se accidentó trágicamente. Según trascendió en su momento, los especialistas que atendieron el lugar siniestrado tomaron fotografías muy gráficas de los cuerpos de la estrella de la NBA y su joven hija, así como del resto de tripulantes del helicóptero. Posteriormente, estas imágenes se habrían difundido en distintos sitios, y compartido con otras personas, como es el caso de un agente policial que, en un club, enseñó las desagradables fotografías a unas chicas para así impresionarlas.
"No quiero ver nunca estas fotografías, quiero recordar a mi marido y a mi hija tal y como eran"
La existencia de las fotografías, así como el hecho de que se hubieran difundido y compartido con una cifra indeterminada de personas provocó un grave malestar emocional en Vanessa Bryant, la viuda de Kobe y madre de Gianna, así como en Christopher Chester, marido y padre de Sarah Chester y Payton Lester, respectivamente, también muertas en el mismo siniestro.
Según relató Vanessa Bryant ante el juez, ella estaba en casa, con sus otras hijas, cuando leyó la noticia de la muerte de su marido e hija mayor. "Salí de casa y corrí hacia un lado para que mis hijas no me vieran. Quería correr y gritar" relata Bryant sobre el dramático momento en el que la noticia salió a la luz. En cuanto le informaron que existían unas "macabras fotografías" tanto de su marido como de su hija, Vanessa empezó a sufrir estrés emocional y a vivir cada día con el miedo de encontrarse con las imágenes en "los portales informativos o las redes sociales". A este hecho, la viuda añadió: "No quiero ver nunca estas fotografías, quiero recordar a mi marido y a mi hija tal y como eran".
Un juzgado federal dictamina que Vanessa Bryant cobre 16,5 millones de dólares como indemnización por las imágenes
Vanessa Bryant anunció en el momento en que supo de la existencia de estas fotografías que emprendería medidas legales. En noviembre del año 2021, el condado de Los Ángeles aceptó indemnizar a las familias afectadas, la familia Bryant y la familia Chester, pagándoles cerca de 2,5 millones de dólares. No obstante, Vanessa Bryant no se conformó con esa cifra, y ha seguido luchando hasta conseguir una cifra reparadora. Ante el juez, Bryant alegó haberse sentido "atacada en su punto ciego, devastada, herida y traicionada".
Por esta razón, el tribunal ha terminado dando la razón tanto a Bryant como a Chester, y ha condenado tanto a los policías y bomberos del condado de Los Ángeles implicados en la toma y difusión de las fotografías a reparar los daños con una millonaria indemnización. Así pues, el condado de Los Ángeles deberá pagar 16,5 millones de dólares a Vanessa Bryant, y 15 millones de dólares a Christopher Chester.