Erika era una niña de 14 años que este martes ha sido asesinada a puñaladas por su vecino, un hombre de 31 años que ha sido detenido. Según fuentes próximas al caso, se trata de un joven que la acosaba y están intentando averiguar cuál ha sido el móvil del crimen. Los investigadores tienen muchas hipótesis sobre la mesa y se están centrando en saber si la víctima se estaba defendiendo de una agresión sexual cuando se produjo el crimen.
Los hechos han pasado en la calle Vázquez de Mella número 69 del barrio de Vallobín de Oviedo (Asturias). La víctima de este suceso es Erika Yunga, una niña de 14 años natural de Ecuador. Sus padres se mudaron a España ya hace más de 20 años y se instalaron en el cuarto piso del edificio donde han asesinado a su hija. El presunto autor de los hechos es un vecino del mismo edificio: tiene 31 años, es de origen moldavo y, según explica el diario El Comercio, este hombre acosaba a la víctima.
Erika fue asesinada, presuntamente, a manos de su vecino
Erika era alumna del IES La Ería y, después de las clases, como cada día, volvió a casa. Cuando estaba ya en el interior del edificio, este vecino del primer piso la abordó y, por causas que todavía se están investigando, presuntamente, la asesinó a puñaladas.
De hecho, fue uno de los hermanos de la víctima quien vio el escenario del crimen. Erika picó en el timbre del edificio y su padre le abrió, pero al ver que tardaba a subir hasta casa, le pidió a su hermano que bajara a las escaleras y que fuera a buscarla y fue entonces cuándo, a la altura del primer piso, vio la chaqueta de la menor y un rastro de sangre.
El asesino se había autolesionado en la cara, en el pecho y en el cuello
Emergencias 112 recibió una alerta a las 16:00 de este martes: los avisaban de que había el cadáver de una niña ensangrentada y un hombre herido en el mismo edificio. Cuando se desplazaron hasta el lugar de los hechos, pudieron comprobar que la menor presentaba signos evidentes de haber sufrido una muerte violenta.
A su lado había el presunto autor de los hechos, que hacía poco más de tres semanas que vivía en el edificio. El hombre también estaba herido, pero estas heridas se las había provocado él mismo autolesionándose en la cara, en el cuello y en el tórax. El hombre ha quedado detenido como presunto autor de los hechos y la Policía Nacional ha abierto una investigación para averiguar cuál ha sido el móvil de este asesinato, que tanta conmoción ha causado en Oviedo.
Investigan si la menor se estaba defendiendo de una agresión sexual
Según explica La Nueva España, asesino y víctima no tenían ninguna relación sentimental y están intentando averiguar cuál ha sido el móvil del crimen. Habrá que esperar a saber los resultados de la autopsia para tener más detalles de la muerte violenta de Erika. La Policía Nacional está intentando averiguar si la víctima se estaba intentando defender de una agresión sexual por parte del presunto autor de los hechos, pero de momento, no hay ninguna hipótesis corroborada.