Cinco ataques consecutivos en una granja de San Lorenzo de El Escorial (Madrid). Una manada de lobos ha matado en la última semana once corderos, cuatro ovejas y cuatro sementales de gran valor genético, según ha informado la Unión de Agricultores, Ganaderos y Selvicultores de la Comunidad de Madrid (UGAMA). Todo ello, además, se habría producido pese a las medidas de protección implementadas, como perros mastines, pastores eléctricos, teleras y mallazos. De hecho, aseguran que ni la presencia del propietario de la explotación ganadera ha sido suficiente para evitar las pérdidas.
Piden un nuevo censo de lobo ibérico
Algunos lobos ibéricos, al parecer, han decidido instalarse en el entorno del paraje de El Campillo. Según ha explicado UGAMA, "estos depredadores devoran diariamente a corderos o terneros sin que por normativa del Ministerio de Transición Ecológica del Gobierno, el ganadero pueda tomar acción de defensa sin enfrentarse a sanciones". Esta es la denuncia de la asociación tras alertar de los animales que han muerto a manos de la manada que, supuestamente, se encontraría en la zona de fincas ganaderas situadas entre Collado Villalba, Alpedrete, Guadarrama y San Lorenzo de El Escorial. Todo ello, en un escenario entre los problemas en las explotaciones ganaderas y la conservación de este ejemplar único.
El lobo ibérico estaría cazando para alimentarse, aunque la otra visión de la cuestión es la afectación a las explotaciones ganaderas. Por ello, el sindicato ha reclamado al Ministerio de Transición Ecológica del Gobierno central a que realice un nuevo censo de este animal que permita gestionar adecuadamente su población, ya que el existente en la actualidad "está desactualizado y a juzgar por los datos que manejan las comunidades autónomas, solamente en Castilla y León podría haber más lobos que en toda Francia". Por otro lado, también ha solicitado a la Comunidad de Madrid la convocatoria de la Mesa del Lobo, ya que consideran que es fundamental para abordar la problemática.
Ayudas a los ganaderos ante los ataques y conservación del lobo ibérico
Ante las peticiones de UGAMA, desde la Consejería de Medio Ambiente y Agricultura de la Comunidad de Madrid han señalado a Europa Press que los ganaderos cuentan con dos tipos de ayudas. Las primeras están orientadas a la prevención de estos ataques en el ganado extensivo, con diferentes medidas de protección; y otras, cuando se han efectuado los ataques, para paliar los daños a las explotaciones. Y sobre todo alientan a los ganaderos a poner en marcha medidas de protección. "Compatibilizar la presencia de ganadería extensiva con la del lobo ibérico en la región es uno de los principales retos en materia de biodiversidad de la Consejería. Para ello, desde el año 2023 existe una línea de ayudas de medidas preventivas", han remarcado.
El lobo ibérico logró sobrepasar el río Duero a principios del siglo XXI, después de su caza furtiva durante décadas y la reducción de su territorio. De hecho, en los años 80, la población estaba reducida a unas manadas prácticamente residuales (en comparación con las de finales del siglo XIX y principios del XX) a la vertiente norte de España. Poco a poco, y con la protección del espécimen único de la península Ibérica, además de las labores de conservación, se ha logrado una población estable que poco a poco vuelve a recuperar su distribución original. Aunque está lejos de la de 1840, cuando se podían ver lobos ibéricos desde Tarifa a Portbou y de allí a Finisterre, pasando por el centro español.