La fiebre del cobre que parece estar arrasando entre los ladrones de Cataluña también los está haciendo cada vez más descuidados. Este martes, 9 de diciembre, cuatro de estos delincuentes pudieron ser detenidos en Lleida después de que los pillaran pelando el recubrimiento de plástico de unos treinta metros de cable que acababan de sustraer de la red ferroviaria. Los sospechosos, cuatro hombres de 18, 21, 41 y 44 años, de etnia gitana y algunos de la misma familia, según ha podido saber ElCaso.com, robaron el cableado a plena luz del día y ni siquiera lo trasladaron a un lugar más discreto para hacer la gestión de quitar el plástico para acceder al cobre.

Esta dejadez les costó una detención, ya que fueron descubiertos por un binomio de los Mossos d'Esquadra que realizaba tareas de patrullaje preventivo por la zona del barrio de Cappont de la capital del Segrià. Alrededor de las dos y media de la tarde, la dotación vio a estas cuatro personas medio escondidas tras un vehículo aparcado en la avenida del President Josep Tarradellas, junto a las vías del tren. 

Sorprendidos en plena faena

Desde el coche no veían bien qué hacían, pero cuando se acercaron, los pillaron en plena faena, cortando y pelando decenas de metros de cables. Cuando los sospechosos se dieron cuenta de que los estaban observando y de que, además, eran agentes de la policía catalana, lo dejaron todo y echaron a correr. 

Tras una breve persecución, los cuatro pudieron ser interceptados por los policías. Los identificaron -tres de ellos tenían antecedentes por diferentes delitos- y los detuvieron, acusados de un delito de hurto. Las pesquisas posteriores revelaron que todo el cable provenía de las vías del tren. 

Tras ser trasladados a comisaría para ser interrogados, fueron puestos a disposición del Juzgado de Instrucción en funciones de guardia de Lleida al día siguiente.