La llegada del buen tiempo hace que las playas de Barcelona se empiecen a llenar cada vez más de bañistas que quieren aprovechar para tomar el sol y remojarse en el agua ante las altas temperaturas que alcanza la capital catalana. Eso, sin embargo, también significa que los ladrones ya tienen un nuevo espacio donde actuar e intentar buscar personas que aprovechan este rato de relajación y están distraídas para robarles sus pertenencias. Eso es lo que este sábado por la mañana ha tenido lugar en la playa del Somorrostro, pero la actitud del delincuente después de cometer el robo lo ha acabado delatando a la policía.
Una patrulla de paisano de la Guàrdia Urbana que estaba haciendo tareas de vigilancia por esta zona del frente marítimo de Barcelona ha visto cómo un hombre salía corriendo de la zona de la arena hacia la calle. Ante esta actitud sospechosa, los agentes han decidido pararlo para saber por qué tenía tanta prisa, momento en que el hombre les ha acabado admitido que acababa de sustraer un teléfono móvil a unos bañistas que se encontraban en la playa. Después de esta confesión, el ladrón ha acompañado a los policías hasta donde estaba la víctima y le han podido devolver el móvil robado. Acto seguido, los agentes han detenido al hombre, mayor de edad y de quien no se ha querido facilitar ni nacionalidad ni antecedentes de quién, como presunto autor de un delito de hurto.
La playa del Somorrostro, territorio de ladrones
El de este sábado no es el único robo que ha tenido lugar en la playa del Somorrostro esta misma semana. La Guardia Urbana ya detuvo a otro ladrón en esta misma zona el pasado Lunes de Pascua, aunque en esta ocasión eran dos ladrones que actuaron de madrugada y las víctimas no eran precisamente unos bañistas, sino que era una pareja que estaba manteniendo relaciones íntimas. Al darse cuenta, los ladrones se acercaron a ellos sigilosamente y les cogieron la mochila sin que se dieran cuenta de ello, cosa que sí que hizo una patrulla de paisano que había en la zona y lo vio todo. Tan pronto como los dos ladrones salieron de la arena, quedaron detenidos y la bolsa fue devuelta a sus legítimos propietarios.