Johan es el autor confeso del asesinato de Claudia, la menor de 17 años de Totana que se ha convertido en la primera víctima mortal por violencia de género de la Región de Murcia. El padre de la menor conoció al presunto autor de los hechos y lo define como una persona "tranquila, estudiosa y educada".
Claudia fue asesinada el martes por la tarde y, miércoles de madrugada, encontraron su cadáver lleno de cuchilladas en el trastero de Johan, su expareja, un hombre de 19 años que actualmente está ingresado en la prisión de manera provisional por este macabro asesinato.
"Tranquilo, educado y estudioso"
Han salido a la luz detalles de la personalidad de Johan y que, como la mayoría de maltratadores, de puertas hacia fuera, son personas encantadoras. De hecho, el padre de Claudia lo define como un chico "tranquilo, educado y estudioso". El padre de la menor asesinada explica que su hija y el asesino se conocieron en el instituto: él hacía bachillerato y ella estaba a la ESO.
Johan es controlador, obsesivo y maltrataba a Claudia
El carácter bondadoso de Johan escondía una personalidad muy cruel con Claudia: era controlador, le cogía el móvil, le prohibía salir con sus amigas, bailar y estar al lado de otros chicos. Después de casi un año de maltrato, la menor decidió dejarlo y fue entonces cuando el presunto asesino ideó un plan para matarla.
Le clavó más de 50 puñaladas y después confesó el crimen a su madre
La engañó diciéndole que fuera al trastero a coger sus cosas y, una vez allí, le clavó más de 50 puñaladas, explica El Español. Después de asesinarla, cenó y fue a dormir como si nada. De hecho, cuando la Guardia Civil se presentó en su casa el miércoles de madrugada, les negó el crimen, pero cuando descubrieron el cadáver de la menor en el trastero, lo confesó todo.
Claudia es la tercera víctima mortal por violencia machista de este 2022
Claudia es la tercera víctima mortal por violencia de género este 2022 y la número 1.1.29 desde que se empezó a contabilizar este tipo de crímenes. El presunto autor de los hechos confesó a los juzgados que la había matado porque no quería seguir la relación con él y, teniendo en cuenta el elevado riesgo de fuga, ha ingresado en la prisión de manera provisional.
Como la mayoría de víctimas de violencia de género, Claudia no había denunciado a su maltratador, un hecho que pone de manifiesto la importancia de proteger las mujeres y adolescentes que sufren este tipo de violencia.