La Policía Nacional ha encontrado hoy el cuerpo sin vida de una mujer de sesenta y ocho años y el de su hijo, de treinta y tres años, en la ciudad almeriense (Andalucía). Según las primeras investigaciones, los agentes apuntan en el hecho de que podría tratarse de un caso de violencia doméstica por los signos de violencia que presenta el cadáver de la mujer. A la vez, se investiga también la causa de la muerte del joven, la cual podría tratarse de un suicidio o de una muerte por causas naturales.
Los vecinos del domicilio donde residían madre e hijo han alertado la policía pasadas las tres de la madrugada del miércoles dieciocho de mayo. Los agentes se han personado en la vivienda, donde han encontrado los cuerpos de la mujer y el de su hijo.
Las primeras investigaciones apuntan a un caso de violencia doméstica
La Policía Nacional investiga el asesinato de la mujer de casi setenta años como un presunto caso de violencia doméstica en manos de su hijo. A pesar de tratarse de un caso muy reciente del cual apenas se ha iniciado la investigación, fuentes policiales han adelantado a la Agencia EFE que el joven, de treinta y tres años, habría asesinado a su madre con un objeto contundente. A continuación, los investigadores creen que el joven se habría suicidado.
Madre e hijo discutieron
La madre y el hijo residient en el barrio de Almedina, en el centro histórico de la ciudad almeriense, y tal como apunta La voz de Almería, eran dos personas muy conocidas en el barrio. Según los testigos recogidos por el medio local, el joven llegó a su casa a las dos y media de la mañana muy alterada, y comenzó una discusión con su madre. Los vecinos, alertados por los gritos y golpes que procedían de la vivienda, llamaron a la policía. Desgraciadamente, cuando los agentes llegaron al lugar de los hechos, ya pasadas las tres de la madrugada, encontraron el cuerpo de la mujer y el del joven, que había entrado en parada cardiorrespiratoria. Los servicios de emergencias trataron de estabilizarlo y lo reanimaron, sin éxito.
Las autopsias, pendientes todavía de realizarse, determinarán la causa de la muerte tanto de la mujer de sesenta y ocho años como la de su hijo, del cual todavía hay dudas sobre si ha sido una muerte natural o un suicidio. Los investigadores se centran en tratar este asesinato como un caso de violencia doméstica, la cual, por definición, engloba cualquier acto de violencia física o psicológica sobre familiares (descendentes, ascendentes, cónyuges, hermanos, etcétera); los agresores pueden ser tanto hombres como mujeres. El año 2021, si bien según el Instituto Nacional de Estadística los casos de violencia doméstica disminuyeron en un 0,5%, se registraron un total de 5.288 denuncias, y 8.240 víctimas de este tipo de violencia.