Más de 32 millones de euros estafados para poder pagar varios juegos en línea. A eso se ha dedicado un hombre que se hacía pasar por inversor para conseguir grandes cantidades de dinero que después su familia utilizaba para poder hacer compras dentro de videojuegos en Internet. La Policía Nacional ha localizado a esta persona en Madrid y la ha detenido como responsable material de 21 estafas -dos a empresas en las que trabajaba y 19 a particulares- junto con tres miembros de su familia, que eran quienes recibían el dinero procedente de estos robos.

El caso arrancó después de que dos empresas denunciaran al mismo hombre por sendas estafas de 13 millones de euros, la primera, y 350.000, la segunda. A estas dos estafas se les sumó una tercera conjunta entre 19 personas a quienes el delincuente habría robado un total de 18 millones de euros. Su modus operandi era siempre el mismo: ganarse la confianza de las víctimas y convencerlas para hacer inversiones de pequeñas cantidades, primero, para después ir pidiendo más asegurando que estaban obteniendo rentabilidades muy altas, lo cual sostenía con documentos falsificados e, incluso, pagando los supuestos intereses obtenidos por acabar de engañar a las víctimas.

Estafó a la empresa donde trabajaba desde hacía 20 años

La primera víctima fue la empresa para la cual hacía dos décadas que trabajaba como contable. Ofreció al administrador sus servicios como inversor, mostrando toda la documentación que acreditaba el destino de los fondos invertidos y los altos intereses que generaban. Lo mismo le hizo a otra sociedad de la cual era gestor, una posición que, además, aprovechaba para ingresar el dinero directamente en sus cuentas bancarias personales sin levantar sospechas. Con respecto a las 19 personas que engañó, se presentó a ellas como inversor profesional con grandes éxitos para envolverlos en la trama.

El dinero, destinado a juegos en línea

A medida que avanzaba la investigación, los agentes comprobaron que los beneficiarios de este dinero eran los familiares de esta persona y que invertían casi la totalidad de los ingresos defraudados en juegos online donde acumulaban pérdidas que llegaban hasta los cuatro millones de euros. Por otra parte, también habían comprado inmuebles e invertido parte del dinero en una plataforma financiera donde habían perdido seis millones.

Con todo, han sido arrestados los cuatro miembros de esta familia en Madrid y los agentes también han solicitado el bloqueo de hasta 35 cuentas bancarias que los investigados habían abierto con fines delictivos.