Los Mossos d'Esquadra investigan un intento de secuestro de una niña de 11 años que el pasado martes por la noche tuvo lugar en el municipio de Torelló, en Osona (Barcelona), tal y como ha podido saber ElCaso.com. Los hechos ocurrieron cuando pasaban pocos minutos de las ocho y cuarto y la niña fue a comprar unos yogures a un supermercado situado en la plaza de Sant Fortià, a pocos metros de su casa y que se puede ver desde el balcón. La menor entró a la vez que dos chicos, mientras un coche estaba estacionado justo enfrente del establecimiento con otras dos personas dentro, uno en el asiento del conductor y el otro en la parte trasera.
Diez euros a cambio de subir al coche
En un principio el vehículo no llamó la atención de la madre, hasta que una vez que la niña salió, se agachó al lado para escuchar algo que el conductor intentaba decirle. Según figura en la denuncia de los hechos, a la que ha tenido acceso ElCaso.com, los ocupantes, a quien la niña no conocía de nada, le ofrecieron diez euros si subía al coche, a lo que la menor se negó. El conductor siguió insistiendo para que subiera al vehículo, momento en que los dos chicos que habían entrado con ella al supermercado volvieron a salir y se unieron a sus amigos en el acoso a la menor.
La niña, muerta de miedo pensando que se la querían llevar, salió corriendo hacia su casa, llorando y gritando pidiendo ayuda a su madre. La mujer consiguió hacer una fotografía del coche de los cuatro chicos, de origen magrebí, que empezaron a decir que solo querían ayudar a la niña y se marcharon del lugar insultando a la madre. La mujer llamó al teléfono de emergencias 112 y hasta el lugar se desplazaron dos patrullas de los Mossos d'Esquadra y una de la Policía Local de Torelló, pero el vehículo de los sospechosos ya se había ido.
Los jóvenes, identificados, y la menor, con mucho miedo
Fruto del presunto intento de secuestro, la menor sufrió un ataque de ansiedad y desde entonces vive con mucho miedo. "Antes salía a jugar al parque y ahora no quiere salir de casa", apunta su madre en declaraciones a ElCaso.com, quien añade que desde entonces lleva varias noches sin poder dormir y en la escuela está muy inquieta. Por su parte, los Mossos d'Esquadra, tras recibir la denuncia de los hechos, han abierto una investigación y han podido comprobar las imágenes de las cámaras de seguridad del supermercado, donde se puede ver la escena y el vehículo de los sospechosos.
Según han confirmado fuentes policiales a este medio, los cuatro ya están identificados y localizados. Se trata de algunos de los ocupas problemáticos de la calle de Sant Josep, que han creado un clima de inseguridad en el pueblo y que han provocado la movilización de los vecinos, hartos con la situación. Por ahora, sin embargo, todavía no se ha detenido a nadie y la investigación continúa abierta. En este sentido, no se ha activado ninguna orden de alejamiento respecto a la menor, tal como pide la familia, pero no se puede descartar que se acabe tomando esta medida cautelar.