Novedades del caso Helena Jubany: después de analizar el ordenador de la bibliotecaria, que fue asesinada hace 20 años, sus familiares piden que se investiguen a tres personas que podrían estar relacionadas con el crimen.

El macabro asesinato de Helena Jubany todavía no ha sido resuelto

Los hechos se remontan al 2 de diciembre del 2001 cuando encontraron el cadáver de Helena: la habían tirado en un patio interior de Sabadell (Barcelona) y estaba desnuda y con el cuerpo lleno de quemaduras. Un mes antes del crimen, Helena recibió dos cartas anónimas: en una le daban unas pastas y una horchata, que era su bebida preferida.

Dos cartas anónimas y drogada con ansiolíticos

Después, le escribieron una segunda carta acompañada con un zumo de naranja que Jubany se bebió. De repente, se empezó a encontrar mal y, por este mismo motivo, fue a un laboratorio para analizar el zumo: la habían drogado con ansiolíticos y, un mes más tarde, fue asesinada.

A partir de entonces, abrieron una investigación policial para averiguar quién había escrito los anónimos y, después de las pruebas caligráficas determinaron que habían sido escritos por Ana Echaguivel y Montserrat Careta, dos compañeras del centro excursionista de Sabadell. Las dos ingresaron en cárcel de manera provisional por su presunta implicación en el crimen.

El caso de Helena Jubany está a punto de prescribir y piden que se investiguen a tres personas que podrían tener alguna relación con el asesinato de la bibliotecaria / Twitter

Santi Laiglesia, el eterno sospechoso del crimen de Helena Jubany

Una vez en la cárcel, Montse se suicidó, llevándose a la tumba todo lo que podía saber sobre el crimen. Ana Echaguivel salió de la prisión el año 2005, ya que se archivó el caso por falta de pruebas. Tanto los policías como los familiares de Helena piensan que Santi Laiglesia, la pareja de Montse, tiene relación con este asesinato, pero nunca lo han podido demostrar, pero eso no ha impedido que se haya convertido en el eterno sospechoso.

El caso está a punto de prescribir y si antes del 2 de diciembre de este 2021 no encuentran al culpable, los autores de este crimen quedarán completamente exentos de cualquier responsabilidad penal. Por este mismo motivo, la familia de la bibliotecaria asesinada ha pedido a la Justicia que investiguen el caso, ya que actualmente la investigación está parada.

Analizan el ordenador de la bibliotecaria y descubren que tiene un acosador

Por surrealista que parezca, nunca llegaron a analizar el ordenador de Helena para saber más pistas del caso. No lo hicieron hasta mayo de este 2021, casi 20 años después. Gracias a este avance descubrieron que Helena tenía un acosador que la molestaba a través de unos anónimos meses antes del asesinato, unos hechos que ella explicó a sus amigas.

"Es gravísimo porque los presuntos asesinos hace 20 años que tienen una absoluta impunidad. Es una impotencia muy difícil de describir"

Esta semana, los familiares de Helena han pedido la imputación de tres personas que, hasta el momento, no eran sospechosas, pero que después de analizar el ordenador piensan que podrían tener alguna relación con el crimen. No ha salido a la luz la identidad de estas personas y han pedido que las investiguen. También han aprovechado la ocasión para criticar la actuación policial en este caso, que según sus testimonios, ha sido negligente: "Es gravísimo porque los presuntos asesinos hace 20 años que tienen una absoluta impunidad. Es una impotencia muy difícil de describir", explican en una rueda de prensa.