Que te despidan del trabajo nunca suele ser una experiencia agradable para ninguna de las partes involucradas, pero a veces no hay más remedio, y lo mejor que podemos hacer es marcharnos e intentar quedar bien con los antiguos compañeros y jefes. No todo el mundo opina lo mismo, como deja claro un hombre de Montornès del Vallès, en el Vallès Occidental, que dejó una granada en su taquilla cuando lo echaron del trabajo. Cuando la encontraron, los Mossos activaron los Tècnics Especialistes en Desactivació d'Artefactes Explosius (TEDAX). Afortunadamente, la granada no tenía carga explosiva, y los agentes de TEDAX pudieron hacerse cargo del artefacto sin problemas ni heridos. Como el aparato no estaba cargado, no se ha investigado ni detenido al hombre, por lo que los Mossos no tienen más datos sobre este.

Los hechos tuvieron lugar el pasado 4 de diciembre, cuando se despidió al hombre por causas que no se han revelado. El personal fue a limpiar su taquilla y, al abrirla, encontró una granada dentro. Después del pánico inicial, se avisó a la Policía Local, y esta, al oír hablar de un explosivo, contactó con los Mossos. La Policía de la Generalitat envió a los TEDAX a hacerse cargo de la situación, los agentes fueron hasta la empresa y, después de formar un perímetro seguro, utilizaron sus herramientas para retirar y examinar el aparato, que resultó no tener carga.

Retiren la granada

Una vez descubrieron que no estaba armada, pudieron respirar todos más tranquilos, incluido el propietario de la granada, que no está ni investigado ni detenido por estos hechos. Aunque el aparato fuera inofensivo, los TEDAX se lo llevaron y siguieron su protocolo, llevándoselo a un área aislada y haciéndolo detonar de forma segura. Esto lo hacen para evitar que los objetos explosivos se activen accidentalmente o se puedan utilizar de cualquier manera que pueda poner en peligro a la gente.