Efectivos de la Guardia Civil investigan el hallazgo de un cadáver que este sábado ha aparecido en el cauce del Torrent de Coanegra, en el municipio mallorquín de Marratxí. El cuerpo, que se encontraba en avanzado estado de descomposición, ha sido encontrado pocos minutos después de las diez de la mañana por una persona que estaba paseando con su perro cerca del torrente. Ha sido precisamente el animal quien la ha guiado hasta él siguiendo el rastro del olor que desprendían los restos. Inmediatamente, ha alertado a los servicios de emergencias y se han activado varias patrullas, así como la comitiva judicial.

En una primera inspección del cadáver, que llevaba puesta ropa deportiva, se ha podido establecer claramente que se trataba de una muerte violenta, ya que presentaba fuertes golpes en la cabeza. A pesar del mal estado en el cual se encontraba el cadáver y que no llevaba ningún tipo de documentación encima, los investigadores han podido identificar a la víctima como un hombre español de 34 años. El cuerpo ha sido trasladado al anatómico forense para que se le haga la autopsia y se ha abierto una investigación para determinar si se trata de una muerte accidental o de una muerte de origen criminal.

La posibilidad de un asesinato gana fuerza

La principal hipótesis a estas alturas, sin embargo, se centraría en un posible asesinato, ya que las heridas que presentaba son más compatibles con golpes hechos con un objeto contundente que con una caída accidental. De hecho, por el estado del cadáver todo apunta que habría muerto hace días, pero, en cambio, vecinos de la zona aseguran que no lo habían visto allí al pasar pocas horas antes, tal como apunta Última Hora. Los agentes de la Guardia Civil han inspeccionado la zona en profundidad en busca de pistas que ayude a aclarar los hechos y también se están revisando las cámaras de seguridad que algunos chalets próximos tienen instaladas por si alguna grabó a alguna persona o a algún vehículo sospechoso.