Caos circulatorio este viernes por la tarde en el centro de Barcelona. El vertido de combustible de un autobús de TMB en la plaza Catalunya ha obligado a cortar el tráfico en el corazón de la capital catalana durante cerca de tres horas. La fuga se ha producido en torno a las seis de la tarde en la zona norte de la plaza, en el cruce de la ronda de la Universidad con la rambla de Catalunya, dejando toda la calzada llena de gasóleo. Cuatro dotaciones de los Bombers de Barcelona se han tenido que activar rápidamente para detener el vertido, que poco después se ha podido dar por controlado. Efectivos del servicio de limpieza del Ayuntamiento de Barcelona se han desplazado hasta el lugar para proceder a la recogida del líquido derramado y volver a dejar la calzada apta para la circulación de vehículos y personas.
Más de una decena de líneas de buses afectadas
El vertido de combustible y las posteriores tareas de limpieza han obligado a la Guàrdia Urbana a cortar el tráfico en la zona. En la ronda de Sant Pere no se ha podido circular en sentido plaza Catalunya desde el cruce con la calle Pau Claris, donde se obligaba a todo el mundo a dar la vuelta. También se ha acordonado la plaza hasta el centro comercial El Triangle. Eso ha comportado afectaciones en más de una decena de líneas de autobús de TMB, concretamente las D50, H16, V13, V15, 19, 22, 24, 52, 55, 59 y 67. Las paradas 561, 1079, 1082, 1124, 1208, 1210, 1257, 1271, 1673, 1797, 1905, 2192, 2563, 2833, 3032 y 3745 han quedado anuladas.
Fruto de todas estas afectaciones se ha producido un caos circulatorio en el corazón de Barcelona, con grandes aglomeraciones de vehículos en calles adyacentes como el paseo de Gracia. La circulación por estas vías era lenta y los ruidos de bocinas eran constantes. Minutos antes de las nueve de la noche, la situación ha vuelto a la normalidad. Con respecto a los peatones, son muchos los curiosos que se han acercado para ver que pasaba ante el gran número de efectivos policiales y de los Bombers en la plaza Catalunya, uno de los puntos más turísticos y transitados de la capital catalana un viernes de verano por la tarde.
