La Sección Primera de la Audiencia Provincial de Palma juzga este jueves, a partir de las 09.45 horas, a un hombre acusado de pilotar una patera desde Argelia con migrantes a bordo sin cumplir la normativa y sin ningún tipo de seguridad.
La Fiscalía pide cinco años de cárcel para este hombre, que supuestamente pertenece a una organización con sede en Argelia dedicada al transporte y entrada irregular de migrantes en España, a quienes cobran 1.250 euros por viaje.
Los hechos juzgados ocurrieron en agosto del año pasado, cuando el encausado pilotó una patera procedente de Argelia con 16 personas a bordo de la misma nacionalidad y se adentró en las costas españolas saltándose las normas vigentes.
El encausado logró desembarcar a las personas en la playa de Cala del Mago, en Calvià, y, a continuación, huyó, pero fue finalmente localizado en las inmediaciones de Cala Bella Dona. El fiscal resalta que la travesía desde Argelia tuvo una duración de dos días y se realizó en una embarcación precaria, de pequeñas dimensiones y sobrepasando en exceso el número de ocupantes.
Otro caso similar
También la Sección Primera de la Audiencia Provincial de Baleares celebra este miércoles, a las 12.00 horas, la vista previa al juicio a un hombre acusado de un delito contra los derechos de los ciudadanos extranjeros.
La Fiscalía pide seis años de prisión para el encausado, que supuestamente pilotó también una patera desde Argelia con 13 pasajeros a bordo de la misma nacionalidad y entró en territorio nacional sin cumplir la normativa. Los migrantes habían pagado entre 1.000 y 1.300 euros para ser introducidos en España.
Un problema recurrente en España
Miles de personas arriesgan todo para intentar llegar hasta España en una embarcación y hay varias entidades ilegales que se benefician de la necesidad de la gente para vender un sitio en la patera que usarán para llegar hasta las costas de algún país europeo del Mediterráneo.
Es un problema recurrente que parece que sigue sucediendo año a año. De hecho, es una tendencia que la pandemia no pudo frenar. En 2020 llegaron a España 2.194 embarcaciones con inmigrantes, algo más que en 2021 (2.149).
Las cifras de personas que han perdido la vida en el Mediterráneo mientras intentaban llegar a España también son muy preocupantes, en 2021 murieron 4.404, los datos han empeorado considerablemente con respecto al año 2020 en el que fallecieron 2.170.
Se trata de una situación límite que se repite a diario en las costas de varios países como Italia o Grecia por su proximidad geográfica con el continente africano. Varias ONG están trabajando para que este problema sea solucionado o para ayudar a que las consecuencias no sean tan graves, pero queda un largo camino por delante.