El Centro Penitenciario del Puig de les Basses de Figueres (Girona) tiene un preso menos después de la expulsión de un hombre de nacionalidad boliviana que cumplía una condena de veinte años entre rejas por haber matado a su mujer en julio del año 2011 en Xiva, en el País Valencià. La Audiencia de València dictaminó esta pena durante el juicio que se celebró en el 2013, pero, ahora, se ha optado a sustituir la cárcel por la expulsión a su país de origen. A cambio, no podrá pisar el Estado español durante los próximos ocho años.

Asesinó a su mujer cuando se enteró de que quería romper con él

El hombre expulsado había sido denunciado por maltrato por parte de su pareja antes; de hecho, había manifestado su intención de romper con él. Esta decisión fue el detonante de una fuerte discusión entre ellos, después de la cual, el hombre, supuestamente, decidió matarla. Y es que días después, el condenado rompió una pieza de su coche y fue al taller mecánico donde trabajaba su pareja. Le pidió acompañarlo a los desagües de la zona para buscar una pieza nueva y ella accedió.

Después de un rato, el hombre decidió coger diferentes caminos hasta que llegaron a un campo de naranjas del municipio valenciano de Xiva. Allí, se sacó una cuerda del bolsillo con el que estranguló a la víctima hasta que la mató. Por todo eso cumplía una pena de veinte años, que ahora le han conmutado por la extradición.

La Policía Nacional de la comisaría de Figueres se ha tenido que encargar de documentar al hombre, ya que no sabía dónde tenía el pasaporte. Aprovechando este trámite, se contactó con la embajada de Bolivia y determinaron que lo expulsarían hasta la ciudad de Santa Cruz. Los agentes lo escoltaron por carretera hasta Madrid, desde donde cogió un vuelo de vuelta a su país.