Abortado el peligro de masacre en una escuela de Palma (Mallorca). Un estudiante menor de edad ha sido detenido este lunes en la capital mallorquina por la Policía Nacional tras analizar las publicaciones que hizo en una red social con fotografías de armas de fuego y donde expresó su intención de atentar en el centro educativo donde estudiaba. La primera difusión en Internet del joven se produjo el pasado 23 de febrero e inquietó a parte de la comunidad educativa y estudiantes por los mensajes amenazadores que profirió asegurando que dispararía a sus compañeros y varios profesores.
Amenazas desde un perfil falso y tiros a profesores y alumnos
Los responsables de la escuela, al tener conocimiento de las intenciones de este alumno, alertaron a la policía por si podían verificar los mensajes. Ante el riesgo de matanza en un centro educativo, poco común en Europa, los agentes consiguieron identificar al presunto menor que quería asaltar a tiros el edificio. No fue tan fácil como pensaban, dado que publicaba en un perfil falso de Instagram. Pero las amenazas eran claras: irrumpiría en el colegio a una hora en concreto para asesinar a sangre fría a profesores y estudiantes. Además, facilitó con mucho detalle la orden de pasillos y aulas donde supuestamente dispararía.
Pero no solo se trataba de un mensaje para perpetrar el crimen desde un perfil falso, sino que lo escribió y publicó con la identidad de una alumna que no tenía nada que ver con el caso. Los investigadores desenmascararon al presunto responsable de las amenazas y pusieron en marcha un dispositivo de seguridad en el centro escolar, mientras la dirección del colegio adoptó medidas por si las intenciones del menor fueran reales.
Detenido en un dispositivo policial especial en la escuela
La Policía Nacional lo interceptó cuando iba al colegio y lo detuvo como presunto autor de un delito de desórdenes públicos. El miedo a una posible gran masacre armada como las que se han visto en varias ocasiones en Estados Unidos puso en alerta toda la escuela, tanto que el edificio fue desalojado mientras los agentes mantenían el operativo por si realmente las amenazas de Instagram pudieran ser ciertas.