La jueza que investiga la muerte violenta de Esther López de Traspinedo (Valladolid) ha pedido que la Guardia Civil deje de intervenir el teléfono del Óscar, el principal sospechoso del crimen. Esta decisión ha causado discrepancias en el entorno de la víctima, ya que él era plenamente consciente de que lo estaban espiando y había tomado una serie de medidas para no levantar sospechas, pero su actitud todavía ha hecho saltar más las alarmas.

La jueza ha tomado esta decisión porque, después de más de tres meses de espionaje, los agentes del Instituto Armado que investigan el crimen, no han encontrado ninguna pista ni indicio que les haga sospechar sobre su presunta autoría en la muerte violenta de la joven de 36 años de Traspinedo, que está siendo tratado como un homicidio imprudente con posible ocultación de cadáver.

La jueza dice que "no hay ningún dato de interés"

"No hay ningún dato de interés y solo habla de los problemas que le está provocando la causa a su negocio de la inmobiliaria, de las noticias que salen en la prensa sobre las diligencias que se están practicando, manteniendo su inocencia o cualquier otra cuestión desvinculada de la causa," explica la jueza.

Óscar sabía que su teléfono estaba pinchado

No obstante, esta decisión ha generado discrepancias, ya que Óscar era plenamente consciente de que su móvil estaba intervenido y, por lo tanto, era muy cuidadoso a la hora de hablar por teléfono. De hecho, según explica la Guardia Civil, daba instrucciones muy precisas a la gente de su alrededor para evitar que dijeran cosas que lo pudieran poner en un compromiso.

"Está utilizando aplicaciones de mensajería que están fuera del alcance de la intervención telefónica y ha dado instrucciones muy precisas a las personas de su alrededor para evitar que hablen del tema", explican los agentes de la Unidad Central Operativa (UCO).

Óscar ha dicho muchas mentiras que hacen sospechar, pero está en libertad sin cargos

A pesar de la decisión de dejar de pinchar el teléfono de Óscar, en ojos de los investigadores, sigue siendo el principal sospechoso de la muerte violenta de Esther López de la Rosa, ya que ha tenido muchas contradicciones y hay muchos datos que no cuadran. A pesar de los indicios y las pruebas que podrían demostrar su presunta autoría, está en libertad sin cargos a la espera de saber cómo avanza la investigación.

Desaparición y muerte de Esther López en Traspinedo

Esther López, de 36 años, desapareció en extrañas circunstancias el 13 de enero a Traspinedo. Después de tres semanas buscándola, encontraron su cadáver en una cuneta de una carretera cerca de donde fue vista por última vez. Después de medio año de investigación, todavía no está nada claro ni cómo murió ni quién hay detrás de su muerte violenta, que está llena de incógnitas que, a pesar del paso de los meses, todavía no se han aclarado.