Los Mossos d'Esquadra han detenido a un hombre de 26 años a quien esta madrugada han pillado con el coche cargado hasta encima de marihuana y con una AK-7 municionada y lista para matar. La policía catalana ha detectado el vehículo cuando circulaba por las Terres de l'Ebre, pero, a pesar de los intentos por pararlo e intentarlo perseguir, ha podido escapar. Con la información policial y las placas de las matrículas, han empezado a buscarlo, hasta que hacia las cinco de la madrugada, lo han podido localizar estacionado en un área de servicio en la autovía A-7, a la altura de Vandellòs, en el Baix Camp (Tarragona).
Los agentes de los Mossos han registrado los vehículos y han encontrado una gran cantidad de marihuana, todavía pendiente de pesar, así como una peligrosa AK-47, un arma de guerra que estaba municionada y preparada por si fuera necesario disparar a alguien. El conductor, de nacionalidad francesa, según ha podido saber ElCaso.com, si bien oficialmente la policía catalana, en el habitual exceso de celo para esconder información, no ha querido decir la nacionalidad exacta, ha quedado detenido. Se ha abierto una investigación con el fin de aclarar los hechos, determinar de dónde había salido la droga y cuál era su destino.
Catalunya, tierra de mafias de marihuana
Las mafias de la marihuana, la mayoría de ellas extranjera y que operan a escala internacional por toda Europa, han convertido Catalunya en su casa. Se trata de organizaciones cada vez más peligrosas y armadas hasta los dientes, incluso con peligrosas armas de guerra. El cultivo y tráfico de marihuana es una de las principales preocupaciones de la Comisaría General de Investigación Criminal (CGIC), que controla la División de Investigación Criminal (DIC) de los Mossos, sobre todo por la espiral de violencia que traen. De hecho, gran parte de los crímenes que se cometen en Catalunya tienen algún tipo de relación con el tráfico de drogas.