La Guardia Urbana de Barcelona ha detenido esta madrugada a un hombre que se dedicaba a robar móviles y tarjetas en una discoteca del Distrito de Sant Martí. El ladrón ha podido ser atrapado por un pequeño error que no había tenido en consideración: al dejar los teléfonos encendidos, sus propietarios han podido rastrearlos y encontrar al delincuente. Cuando se le ha identificado, el hombre llevaba encima seis teléfonos que no eran suyos. La Guardia Urbana lo ha detenido, acusado de un delito de hurto. En su habitual exceso de celo, el cuerpo no ha querido revelar más datos del detenido, como la nacionalidad o la edad.

Los hechos han tenido lugar esta madrugada en una discoteca de la calle Almogàvers, en el barrio de Poblenou. Durante la noche, dos personas se han dado cuenta de que sus móviles habían desaparecido, han avisado al personal de seguridad y han comenzado a buscar sus dispositivos, utilizando la función de geolocalización para rastrearlos. Tras una búsqueda rápida, han encontrado a un hombre que uno de ellos ha podido identificar, reconociendo a la persona que se había acercado a él antes. El personal de seguridad ha avisado a la Guardia Urbana, cuerpo que ha ido hasta la discoteca a hacerse cargo de la situación.

Móviles y tarjetas robados

Una vez allí, han cacheado al hombre y le han encontrado encima seis teléfonos móviles de los que no podía justificar la procedencia. Además, también tenía encima varias tarjetas de identidad, crédito y transporte que no estaban a su nombre. Los agentes le han retirado los objetos y lo han detenido, acusado de un delito de hurto. También han podido devolver tres de los teléfonos a sus propietarios, mientras que los otros tres todavía están en posesión del cuerpo policial, a la espera de que los reclamen personas que puedan justificar su propiedad. Por lo tanto, si has perdido el móvil esta madrugada en la discoteca, puede que lo tenga la Guardia Urbana.