El propietario de una finca agraria de Sant Esteve Sesrovires (Barcelona) ha sido denunciado penalmente por los Mossos d'Esquadra por un presunto delito de maltrato animal. Y es que en los terrenos de la propiedad encontraron casi un centenar de animales raquíticos y en unas condiciones de insalubridad que ponían en riesgo sus vidas por potenciales enfermedades. En este sentido, los agentes de la Unidad Regional de Medio ambiente (URMA) de la policía catalana determinó que los animales -un poni, 69 cabras y ovejas, doce perros y cinco ocas- hacía tiempo que no recibían ningún tipo de atención veterinaria.
Después de tener conocimiento de esta situación, el pasado 12 de septiembre los Mossos d'Esquadra, con la colaboración de la Policía Local de Sant Esteve Sesrovires, hicieron una entrada, autorizada por Juzgado de Instrucción en funciones de guardia de Martorell, y decomisaron todos los animales.
Las cabras y las ovejas estaban reclusas en una pequeña parcela llena de desperdicios que en ningún caso cumplía con las condiciones higiénico-sanitarias requeridas para el mantenimiento de estos animales. Por su parte, el poni fue encontrado desnutrido, igual que los perros, todos famélicos y ligados con cuerdas que limitaban sus movimientos, con los morros amordazados que les impedían comer.
Trasladados a varios centros de recuperación
Los 87 animales fueron rescatados de la finca y trasladados a varios centros de recuperación de todo el territorio, mientras el propietario está siendo investigado por maltrato. Cabe recordar que las infracciones cometidas contra la ley de protección de los animales pueden comportar multas de entre 500 y 10.000 euros, las leves; de hasta 50.000 euros, las graves; y hasta 200.000 euros, las muy graves.
