En torno a las ocho de la mañana de este lunes, tres turistas alemanes han sacado la cabeza por el balcón de la habitación del hotel donde se alojaban estos días y han visto, horrorizados, el cuerpo inerte de su amigo tendido en la calzada de la calle Guillem Cirerol. Inmediatamente, han avisado al personal de recepción que ha llamado a los servicios de emergencias. Desgraciadamente, los sanitarios no han podido hacer nada más que confirmar la muerte del joven, de 20 años, por politraumatismos.
La Policía Nacional y la Policía Local también se han desplazado hasta la dirección del hotel y han puesto en marcha una investigación para determinar las causas de la muerte. Aunque todo indicaba que el chico se había despeñado desde el balcón, los agentes no han querido descartar ninguna hipótesis hasta que no se confirmara la caída. Y es que sus amigos no sabían nada de él desde las tres de la madrugada, cuando ellos se marcharon a dormir después de haber pasado la noche de fiesta consumiendo una gran cantidad de bebidas alcohólicas.
Se ha caído de la barandilla mientras fumaba
La policía ha registrado la habitación del Hotel Sol de Mallorca, situada en el número 5 de la calle Amilcar, en la cual se alojaban los chicos, y han comprobado que, junto a la barandilla del balcón, había un taburete. Según la reconstrucción de los hechos, el joven turista habría salido a fumar antes de irse a la cama y habría subido a la barandilla con ayuda del taburete para sentarse. Como iba ebrio, habría perdido el equilibrio o se habría quedado dormido allí mismo, con la consiguiente caída mortal desde una altura de dos pisos.
Cuando los amigos se han despertado esta mañana y no lo han encontrado en su cama, se han preocupado y han salido al balcón para buscarlo. Desgraciadamente, solo han podido ver su cadáver en el suelo; el chico habría muerto instantáneamente a consecuencia de la caída.
