Unos narcotraficantes de hachís intentaron salirse con la suya a finales de noviembre pasado en L'Ametlla de Mar (Tarragona) cuando intentaron escapar con una furgoneta a rebosar de esta droga. A bordo del vehículo iban tres personas, que quedaron detenidas por la Policía Nacional después de estrellarse contra un coche patrulla y quedar inmovilizados a raíz del choque. Durante el registro de la furgoneta, encontraron 21 fardos que contenían un total de 845 kilos de hachís, además de un subfusil de asalto con munición de guerra del calibre 7.65.

Los delincuentes huían de una intervención policial que se puso en marcha a raíz del conocimiento de la existencia de un grupo criminal asentado en una urbanización de L'Ametlla de Mar. Esta mafia se dedicaba principalmente al alquiler de viviendas que hacían las funciones de "guarderías" de la droga, es decir, un punto intermedio entre la plantación y el punto de distribución final -la mayoría de las veces, esta droga procedía de desembarques hechos al delta del Ebro-. Con esta información, se estableció un dispositivo de vigilancia en torno a esta urbanización, con cuya ayuda se recopiló bastante información para poner en marcha la batida policial.

Intentan escapar y se estrellan contra una patrulla policial

Durante las tareas de vigilancia en torno a esta urbanización, se observó que entraba y salía una furgoneta -más tarde se comprobó que era sustraída en Bélgica, con placas de matrícula falsas- que en el argot policial se denomina "vehículo lanzadera" - con tres ocupantes. Los agentes decidieron parar la furgoneta cuando salía de la urbanización. Los supuestos narcotraficantes, en un intento por evadir la detención, embistieron uno de los vehículos, poniendo en riesgo la vida de los agentes que había dentro. No obstante, fueron ellos quienes quedaron inmovilizados, dando tiempo a los policías para rodearlos e impedir su huida.

Durante el registro de la furgoneta se descubrieron 21 fardos que, una vez abiertos, revelaron 845 kilos de hachís, además de un subfusil de asalto completo con 74 cartuchos del calibre 7.65, un inhibidor de frecuencias, un dispositivo de visión nocturna, un detector de dispositivos de geolocalización y otro de visión nocturna, y 2.420 euros en efectivo. Los tres ocupantes de la furgoneta quedaron detenidos por los delitos de tráfico de drogas, tenencia ilícita de armas, robo de vehículo y falsedad documental. Los tres ingresaron en la prisión de manera provisional por orden del magistrado del Juzgado de Instrucción en funciones de guardia.