Este martes el Juzgado de lo Penal número 8 de Madrid había citado a los que fueron concursantes de Gran Hermano Revolution Carlota Prado y José María López. El motivo del juicio es la agresión sexual que sucedió en el programa en 2017 tras una fiesta organizada por la productora en la casa de Guadalix de la Sierra en la que convivían los participantes. El acusado, con quien la víctima mantenía una relación sentimental desde hacía unos días, aprovechando que Carlota estaba inconsciente, la violó, dejando la agresión grabada en vídeo por las cámaras del programa.
El motivo por el que Carlota Prado no acudió a su juicio
Tras el gran impacto mediático del proceso judicial, que ahora ya tenía fecha, finalmente no se pudo celebrar la vista oral programada, ya que Carlota Prado no pudo acudir ante el tribunal por problemas de salud, tal y como explicó su abogado. El letrado aseguraba en la puerta de los juzgados: "tiene un problema de salud y no está en condiciones de declarar". Después detallaba que se trataba de un grave problema mental que la había forzado a ingresar en un centro psiquiátrico el pasado diciembre.
El ingreso de Carlota en este centro es, según su defensa, involuntario, aunque aún no han aportado al juzgado el informe psicológico que acredite los "problemas psicológicos de gravedad" que presenta la víctima, que se han comprometido a entregar. Por su parte, la madre de la víctima ha asegurado que está imposibilitada para comparecer. El acusado, José María, sí que se ha presentado a los juzgados y su defensa alega que la víctima ha tenido "mucha actividad" en redes sociales en los últimos tres días y ha subrayado la "contraproducente situación" de internamiento interesada por parte de Carlota.
Aplazado el juicio por la violación en 'Gran Hermano'
De hecho, el alargamiento del proceso judicial, que trata unos hechos ocurridos hace casi cinco años, influirán en la sentencia, a la que podrá aplicarse la atenuante de dilaciones indebidas, que aplica una reducción de la condena en casos en los que la Justicia tarda demasiado en pronunciarse. De momento, la Fiscalía pide para José María dos años y seis meses de cárcel, además de una indemnización de 6.000 euros por los daños morales causados. También piden esta cantidad a la productora de Gran Hermano, Zeppelin TV, por los daños al enseñarle a solas y de forma forzada las imágenes de la agresión, que no llegaron a emitirse en antena.
Una semana después de la expulsión de José María y de que Carlota abandonara provisionalmente la casa, ella explicó a las cámaras lo que sucedió la noche de los hechos. Ella aseguraba que "estaba inconsciente" cuando ocurrió "un hecho grave y desagradable". Y aunque en un primer momento no quiso tomar medidas legales contra el presunto agresor, finalmente lo denunció, junto a la productora. Como tantos otros procesos judiciales, se vio dificultado por la pandemia de la covid. Ahora habrá que esperar a una nueva fecha para el juicio.