La última lata de cerveza compartida por dos amigos desencadenó una sangrienta discusión durante la cual los dos implicados casi pierden la vida. Los hombres, los dos de origen senegalés, estaban compartiendo unas cervezas en una plaza del centro de Granada cuando se dieron cuenta de que solo les quedaba una. Ambos querían acabársela, y, como no se ponían de acuerdo, se enzarzaron en una fuerte discusión que acabó a puñaladas que podrían haber sido mortales si no hubiera sido por la rápida intervención de los servicios de emergencias.

Los hechos se remontan al 19 de julio del 2021. Aquel día, hacia las diez de la noche, la pequeña plaza Cristo de las Azucenas, en el barrio de Albaicín de la ciudad andaluza, se convirtió en el escenario de una violenta pelea entre estos dos hombres. Ahora, la Fiscalía de Granada solicita para cada uno de los implicados siete años y siete meses de prisión, acusándolos de sendos delitos de homicidio en grado de tentativa.

Casi mueren por una lata de cerveza

La discusión entre los amigos empezó a gritos e insultos, recriminándose mutuamente haber bebido más cervezas que el otro, y que, por este motivo, la última lata le tocaba a él. No conseguían ponerse de acuerdo, sin embargo, y la situación escaló hasta llegar a las agresiones físicas. Los puñetazos no fueron suficientes, parece, y uno de ellos sacó una navaja con la que apuñaló a su contrincante. El otro le arrebató el arma en un punto y lo hirió de vuelta.

Algunos de los vecinos que paseaban en aquellos momentos por la plaza avisaron a las autoridades, y al lugar llegaron varias patrullas de la Policía Local y ambulancias de los servicios sanitarios de Granada. Los acusados tenían heridas muy graves; uno de ellos había sido apuñalado en el pecho en varias ocasiones, mientras que el otro tenía lesiones por arma blanca en la zona cervical. Ambos tuvieron que ser sometidos a intervenciones quirúrgicas para poder salvarles la vida.

Los paramédicos los estabilizaron y los evacuaron rápidamente al hospital más cercano, donde quedaron ingresados durante días. Después de recibir el alta médica, los dos hombres fueron trasladados a la prisión de manera provisional a la espera de que empezara el juicio contra ellos, previsto para el próximo 22 de noviembre en la sección segunda de la Audiencia de Granada.