Susto a primera hora de la mañana de este martes en Barcelona, delante de la discoteca Wolf, en la calle de los Almogávares, en la zona del Bogatell. Furgonetas del Área Regional de Recursos Operativos (ARRO) de los Mossos d'Esquadra y de la Unidad de Refuerzo para las Emergencias y la Proximidad (UREP) de la Guardia Urbana de Barcelona se han desplegado delante de la discoteca y han accedido dentro de ella, con cascos y escudos. En la zona también había desplegadas ambulancias del Sistema de Emergencias Médicas (SEM). Este dispositivo, y más con el nivel de alerta antiterrorista que hay actualmente en Catalunya y en el resto de Europa, ha despertado gran interés y expectación en la zona.

Según ha podido saber ElCaso.com, sin embargo, se ha tratado de un ejercicio táctico organizado por las dos policías que forma parte del plan de formación de las unidades de intervención de la Guardia Urbana y de los Mossos d'Esquadra. No se trata de un simulacro concreto, donde se quiera ensayar algún tipo de intervención concreta en esta discoteca, sino que forma parte del plan de trabajo continuo que hacen tanto el ARRO de Barcelona como la UREP de la policía de la ciudad. Hace pocos meses se hizo un ejercicio parecido también a la discoteca Apolo, al Paralelo.

Ejercicio táctico en la discoteca Wolf de Barcelona

El objetivo de este ejercicio es poder entrenar como responder a un posible incidente que se pueda desencadenar en el interior de un local de ocio de la ciudad de Barcelona y cuál es la mejor manera de actuar, policialmente hablando, a la hora de hacer la intervención. Hay que recordar que estos tipos de locales, como la discoteca Wolf o el Apolo, son muy concurridos cuando están abiertos y una entrada policial, por el incidente que sea, puede ser muy dificultosa y hace falta entrenamiento.

Fuentes municipales han aclarado que no se trata de un entrenamiento de formación antiterrorista, cuando menos, no estaba previsto que fuera así. Hay que recordar, eso sí, que todas las policías reciben formación en este ámbito y se ha reforzado el nivel de seguridad y de exigencia de autoprotección a raíz de la escalada de violencia en la zona de Israel después del ataque terrorista a gran escala de Hamás. Este fin de semana una llamada alertó de una bomba a la discoteca a Razzmatazz, si bien finalmente resultó ser una falsa alarma. La discoteca cerró antes de tiempo después de desalojar a todas las personas que había en el interior.