Aunque la tecnología ha ayudado a que nuestra vida sea mucho más sencilla en varios aspectos, algunos delincuentes se aprovechan de sus conocimientos informáticos y de nuestra confianza con respecto a algunas instituciones. Es por eso que en los últimos años se han multiplicado los timos y estafas a través de internet.

Es por eso que conviene estar informado sobre los peligros que puede suponer caer en una de estas trampas. De hecho, también es crucial saber qué métodos usan para engañar a los demás y robar a las personas sus datos personales o incluso su dinero.

Las multas de tráfico parece que se han convertido en la nueva fuente de ingresos para los estafadores de internet. La intención de estos delincuentes es la de engañarnos con una notificación que nos pueda hacer creer que es perfectamente legal y que, si no pagamos, podemos tener problemas serios.

La estafa de la DGT

En la nueva estafa, en la que varias personas ya han caído, se implica a la Dirección General de Tráfico (DGT) para hacer creer a las víctimas que la notificación que han recibido es de una institución real. De hecho, la propia DGT ha advertido de esta actividad delictiva en sus redes sociales para que los conductores no se dejen engañar.

Cada vez es más frecuente que los criminales busquen, además de nuestro dinero, nuestros datos personales. Con ellos pueden lucrarse al venderlos a otras personas que vayan a utilizarlas con fines ilícitos o incluso podemos tener problemas legales que se nos imputen por la suplantación de identidad. Es muy peligroso ceder nuestros datos a terceros y más si no sabemos qué pueden hacer con ellos en un futuro.

La DGT ha publicado en su cuenta de Twitter un tweet en el que advierten a los conductores de esta nueva estafa que consiste en hacer creer a la víctima que ha sido multada a través de un correo electrónico en el que le informan de su sanción. Recomiendan que no se pulse ningún enlace de los muchos que hay en el correo, puede ser muy peligroso, ya que los criminales podrían robar los datos personales del presunto multado.

De hecho, lo que se debe hacer es marcar el mensaje como spam, eliminarlo y, si es posible, no abrirlo para evitar cualquier tipo de problema que se pueda producir. De hecho, una multa jamás debería de llegar por correo electrónico, la DGT notifica a través de correo convencional este tipo de sanciones.

¿Qué debo hacer si recibo el correo?

En el caso en el que recibamos el correo electrónico en el que los estafadores se hacen pasar por miembros de la DGT y hayamos pulsado en alguno de los enlaces deberíamos de hacer algunas capturas, guardar todos los datos que podamos conseguir.

Deberíamos de notificarlo ante la policía, ayudándoles con todo lo que esté en nuestra mano, capturas, correos, datos... Todo puede ser clave para que los agentes que se encarguen de esta investigación detengan a los criminales.

También podemos ayudar a otras personas a que no caigan en el mismo error que nosotros compartiendo nuestra experiencia a través de las redes sociales.