Los Mossos d'Esquadra han detenido a tres jóvenes, de 21, 23 y 28 años, acusados de tres robos con violencia, aparte de varios delitos de amenazas, coacciones y allanamiento de morada. Los arrestados habían hurtado tres cadenas de oro arrancando las joyas directamente del cuello de las víctimas, entre el 14 y el 20 de agosto. Después de conseguir identificar y localizarlos, la policía catalana descubrió que habían ocupado un piso en la calle Plana de l'Hospital de Sant Cugat del Vallès (Barcelona) y que lo habían alquilado a varias personas para beneficiarse económicamente.
Denunciados por uno de los inquilinos
A finales del pasado mes de agosto, un hombre que había alquilado una de las habitaciones del piso ocupado acudió a la comisaría de la Policía Local de Sant Cugat para denunciar que los tres jóvenes habían entrado en su habitación en varias ocasiones y que le habían amenazado con un cuchillo para que abandonara el inmueble. Gracias a la descripción dada por este individuo, los agentes de la policía catalana, junto con la municipal, localizaron a los sospechosos y los detuvieron el pasado 30 de agosto.
En un principio estaban acusados de haber cometido los delitos de allanamiento de morada, amenazas y coacciones, pero durante los interrogatorios y las consiguientes perquisiciones, los investigadores se dieron cuenta de que eran las mismas personas que buscaban desde principios de mes por haber robado tres cadenas de oro en medio de la calle en Sant Cugat. Los tres han pasado ya a disposición judicial delante el juzgado de instrucción en funciones de guardia de Rubí.
El pasado viernes 1 de septiembre, los Mossos d'Esquadra detuvieron en Barcelona a un hombre que acababa de arrancar un reloj de la muñeca a un turista en Ciutat Vella, valorado en 50.000 euros. La víctima denunció inmediatamente los hechos, y una patrulla de la policía catalana consiguió identificar al sospechoso por la calle. Después de pararlo comprobaron que tenía el reloj sustraído, y lo detuvieron acusado de robo.