Pillan a uno de los fugitivos más buscados de Holanda en una casa de Valencia con un terrorista y con 11 kg de cocaína rosa, una droga muy peligrosa.
Fugitivo holandés muy peligroso en Valencia
El ciudadano holandés E.G.L, de 21 años, reclamado por las autoridades de su país por un homicidio que tuvo lugar en Amsterdam en el 2019, ha sido detenido en Valencia, en un domicilio que ocupaba al lado de otro detenido, de origen turco y, por lo visto, vinculado al grupo terrorista de extrema derecha Grey Wolfs, en una operación en la cual se han confiscado 300 kilos de cocaína rosa, que es el nombre con el cual se conoce popularmente una sustancia estupefaciente compuesta por dos drogas: LSD y MDMA.
Asesina a tiros a un joven de 26 años en un parking de Ámsterdam
El fugado de las autoridades holandesas y ahora detenido está acusado de haber asesinado a tiros a un joven de 26 años en un céntrico parking de Ámsterdam, después de una discusión a altas horas de la madrugada.
"Estos hechos quedaron registrados en las cámaras de seguridad del parking y produjeron una gran alarma social y seguimiento mediático, tanto por la forma en que se llevó a cabo el crimen, como por la corta edad de la víctima," señala la Guardia Civil en una nota, que recuerda también que "E.G.L se mantuvo en paradero desconocido, pero reapareció en la vida social holandesa en un videoclip de un conocido rapero holandés".
Estaba en un domicilio con un terrorista de Grey Wolves
También ha sido detenida otra persona vinculada a la organización turca de extrema derecha Grey Wolves", implicada en varios asesinatos y especialmente conocida por el intento de asesinato del Papa Juan Pablo II en 1981. Grey Wolves", conocida por sus vínculos con organizaciones criminales de varios países europeos, está ideológicamente vinculada con la idea supremacista del retorno a Europa del Imperio Otomano.
Prisión sin fianza para el terrorista y para el asesino
La investigación ha sido desarrollada por el Equipo Fugitivos de la Justicia de la Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil, que partió de una pista que situaba al fugitivo a Barcelona, posibilidad que acabó siendo descartada por los agentes. Por otra parte, varias piezas de información que la policía holandesa fue entregando a la Guardia Civil, llevaron a los investigadores a buscar pistas sobre el paradero de E. G. L. en Marbella, e incluso en Portugal. Las indagaciones condujeron en Valencia, donde, finalmente, han conseguido detenerlo.
Las detenciones fueron realizadas por la Unidad Especial de Intervención de la Guardia Civil, dada la peligrosidad de los arrestados y el Juzgado de Instrucción Número 1 de Valencia ha decretado prisión sin fianza para los dos detenidos.