La Guardia Urbana de Lleida ha pillado con las manos en la masa al responsable de la quema de una veintena de contenedores este sábado de madrugada en el municipio. Se trata de un chico menor de edad que se ha dedicado a recorrer las diferentes calles de la ciudad prendiendo fuego a los containers, resultando en dieciséis de ellos calcinados completamente, y varios coches afectados por las llamas. Este domingo de madrugada, el joven ha vuelto a salir, mechero en mano, y ha provocado ocho nuevos incendios en el barrio de la Bordeta, antes de que una patrulla de la policía municipal haya conseguido detenerlo.
Después de la intensa noche que han pasado a los Bombers de la Generalitat, apagando un incendio tras otro, la Guardia Urbana ha montado un dispositivo con el objetivo de localizar y detener al pirómano, quien algunos de los testigos han asegurado se movía en patinete. Aunque el sábado ha podido escapar, esta madrugada no ha tenido tanta suerte: la patrulla le ha identificado justo cuando tiraba un papel encendido en un contenedor en la calle Hostal de la Bordeta. Al darse cuenta de que había sido pillado, el chico ha intentado huir, pero después de una breve persecución ha podido ser parado.
Incendios por toda la ciudad
Entre las dos y media y las cuatro de la madrugada del sábado, el chico ha provocado incendios en varias islas de contenedores de las calles Hostal de la Bordeta, donde ha vuelto durante esta noche, Bellavista, Ignasi Basturs, Príncep de Viana, la avenida de Les Garrigues, la avenida de Flix y la avenida Artesa, esquina con la plaza Sant Jordi. De dieciséis de los containers de estas calles solo han quedado los restos, y el fuego también ha acabado afectando a siete coches que estaban aparcados por los alrededores y a varias fachadas de los edificios de al lado.
Desde la Paeria se había hecho un llamamiento a la ciudadanía para ayudar a encontrar al pirómano, y la alcaldesa de Lleida, Begoña Iglesias, ha valorado la "rápida actuación" de los agentes y el refuerzo policial que se ha puesto en marcha para poder detener al presunto autor de los hechos.