Los Mossos d'Esquadra han desmantelado una plantación de marihuana oculta en una zona boscosa en el municipio de la Pobla de Cérvoles, en las Garrigues (Lleida) y han detenido a dos personas relacionadas con el cultivo. Todo empezó a principios de este mes de octubre, cuando una patrulla de la policía catalana tuvo conocimiento de la posible existencia de esta plantación junto a la balsa de riego de un particular. Según pudieron comprobar los agentes, los responsables del cultivo robaban el agua de esta balsa para regar las plantas gracias a una compleja instalación con la cual la extraían discretamente para llenar otra balsa propia de 20 m³.
Se habían construido una cabaña de madera con troncos de árboles del bosque
Después de varias vigilancias, los investigadores de los Mossos descubrieron que los responsables de la plantación habían aclarado el bosque y se habían montado un campamento en el cual, además de la balsa de agua que se habían construido de manera artesana, también habían montado una cabaña de madera hecha con troncos de árboles del bosque para poder vivir allí. Desde allí vigilaban las 1.213 plantas de las cuales constaba la plantación. Estas, de unos dos metros de altura, se habían distribuido en sacos con tierra, en vez de ser plantadas directamente en el suelo. Este método permite iniciar con más facilidad la plantación en un lugar discreto y controlado, para transportarlas más fácilmente a otro lugar del bosque una vez las plantas tienen la altura deseada, reduciendo así el tiempo que pasan en zonas más expuestas.
Finalmente, este martes, 8 de octubre, se procedió al desmantelamiento con un operativo conjunto de equipos del ARRO, agentes de investigación y de seguridad ciudadana. A pesar de la dificultad del terreno, la densidad de la vegetación y la posible presencia de trampas, los agentes pudieron acceder al cultivo, donde también encontraron 100 kilos de cogollos valorados en más de 250.000 euros. Se detuvo a uno de los responsables, un hombre con varios antecedentes por hechos similares, mientras el otro consiguió escapar. Sin embargo, se ha llevado a cabo un despliegue por la zona de madrugada intentando buscar a los fugitivos, gracias al cual se ha detenido a otro narcotraficante que esperaba en el arcén de la carretera que lo vinieran a buscar. Los dos arrestados, de 35 y 37 años, están acusados de delitos contra la salud pública y pertenencia a grupo criminal.