Agentes del Servicio de Protección a la Naturaleza (Seprona) de la Guardia Civil, en colaboración con la Policía Local de Tortosa, han denunciado un taller mecánico ilegal ubicado en una finca particular en la pedanía de Jesús. Sus responsables habían cogido una antigua granja de pollos que estaba abandonada y la habían convertido en una nave donde se dedicaban al mantenimiento y la reparación de vehículos de motor. Lo hacían, sin embargo, sin tener la licencia adecuada por este tipo de actividad. De hecho, tampoco se habían inscrito como empresa en la Seguridad Social ni habían llevado a cabo ninguna de las gestiones necesarias con las instituciones públicas.

Al registrar el interior de la nave, los agentes encontraron varios coches que estaban en medio reparar, así como máquinas industriales, recambios y varias herramientas para poder llevar la actividad. También se encontraron las piezas antiguas de los coches o neumáticos viejos, además de baterías y restos de aceite. La gran mayoría de residuos tenían la calificación de peligrosos y contaminantes para el medio ambiente. Ante esta situación, los agentes pusieron trece denuncias por infracciones administrativas por la mala gestión de los residuos, la falta de seguridad, la falta de documentación y no pagar los impuestos correspondientes.

El taller contenía multitud de residuos peligrosos y contaminantes / Guardia Civil

Denuncian otro taller mecánico ilegal en Riudoms

Por otro lado, los agentes del Seprona, esta vez con la colaboración de la Guardia Municipal de Riudoms, también han denunciado otro taller mecánico ilegal en este municipio del Baix Camp (Tarragona). Los agentes comprobaron que tampoco disponía de la licencia necesaria para dedicarse a la reparación de vehículos de motor. Además, en este caso, comprobaron que los responsables habían hecho conexiones irregulares a la red eléctrica, motivo por el cual se alertó a la empresa distribuidora. El personal técnico de la compañía, no solo confirmó la conexión fraudulenta, sino que aseguró que ya hacía años que se había hecho. Finalmente, cortaron el suministro por el peligro que comportaba y levantaron nueve actas de denuncia por infracciones administrativas.