Cae una de las rutas de cocaína con más camuflaje de los últimos años. La Guardia Civil ha detenido a tres personas e investigado a otras cuatro pertenecientes a una red criminal que traficaba con cocaína oculta en botes y bolsas de especias de marcas registradas desde Colombia a España. Los agentes detectaron el envío irregular de cúrcuma, pimentón o tomillo en el aeropuerto Adolfo Suárez Madrid-Barajas, procedentes del país transandino, que tenían como destino final una nave comercial en Badajoz de una empresa de mercancías que haría la distribución posterior por el territorio.
Así fue el proceso para acabar con la ruta colombiana de la cocaína
En una primera investigación, previa, del Equipo contra la Delincuencia Organizada y Antidroga (EDOA) de la Guardia Civil de Badajoz se interceptó una partida de 1.800 kilos de cúrcuma, pimentón o tomillo, entre otras especias. O eso parecía. Pero el análisis posterior verificó que los etiquetados eran falsos y que, aunque utilizaban marcas comerciales registradas colombianas para darles apariencia legal, lo que había camuflado era cocaína. Por ello, ante estas evidencias, los agentes detuvieron al responsable de la empresa de distribución de mercancías de la ciudad extremeña y se investigó a dos de sus trabajadores por un delito contra la salud pública.
Las especias intervenidas en Badajoz dieron, tras el análisis en el laboratorio de toxicología de Sevilla, un total de 42 kilos de cocaína que supondrían casi 200.000 dosis. Esto llevó a ampliar la investigación para tratar de descubrir la trama y cuál era la ruta que utilizaban para introducirlas en España. Poco después, los agentes pudieron implicar a una vecina de Madrid, de nacionalidad colombiana, con vinculación familiar con el responsable del envío desde Colombia, y a tres vecinos de Málaga, que serían los que se encargaban supuestamente de la logística del envío tanto para la extracción de la droga como para su posterior distribución. La Guardia Civil ha detenido a tres personas e investiga otras cuatro.