Los Mossos tienen claro que el robo no fue el móvil del crimen que acabó con la vida de Fátima D., una conocida camarera de Torroella de Montgrí, que este domingo al mediodía fue localizada en un camino junto a la Gola del Ter, allí donde desemboca este río, junto al Estartit.
Qué motivó el crimen, sin embargo, todavía no está claro y oficialmente los agentes de la División de Investigación Criminal (DIC) de los Mossos, por el hermetismo que obliga el secreto de sumario, evitan dar detalles. Sin embargo, una de las principales hipótesis que ahora mismo está sobre la mesa de los especialistas en homicidios de la DIC de la región de Girona es un posible crimen machista, según ha podido saber ElCaso.com. La policía investiga el entorno de la mujer para aclarar qué relación han tenido las personas más próximas a ella, como también su actual pareja, con el crimen. Fuentes de la investigación han explicado que el hombre había tenido problemas con la mujer y que constan antecedentes por violencia, si bien oficialmente no lo han querido confirmar.
Localizada en el interior del vehículo
Fátima apareció en un camino secundario, a casi 5 minutos en coche del núcleo de Torroella, donde vivía ella. El vehículo fue localizado por amigos de la mujer, que gracias a la localización del terminal la pudieron ubicar y encontrar, ya sin vida, después de horas desaparecida. La mujer estaba en el interior, en la parte delantera del vehículo, sentada. Los primeros informes policiales apuntan en el hecho de que la mujer fue asesinada con arma blanca, un cuchillo que no ha sido localizado, y que fue herida en el interior del vehículo mismo, la noche de sábado a domingo.
Las indagaciones de la DIC de los Mossos tendrán que servir para aclarar el móvil y también localizar y detener al asesino, un hecho que todavía no ha pasado. Algunas fuentes aseguran que la persona que actualmente era la pareja de la mujer no aparece, si bien a la policía, siguiendo en el hermetismo habitual de este tipo de investigaciones, no lo han confirmado.
El Ayuntamiento se personará como acusación popular
Fátima trabajaba en el bar de la Plaça, en Verges, a pocos kilómetros de Torroella, donde había vivido desde 2014, cuando consta que se empadronó, según fuentes municipales. Hasta hace poco trabajaba en este pueblo, donde vivía con su hijo, pero el local cerró y lo Ángeles, la propietaria del bar de Verges, que la conocía, la contrató, y desde entonces que trabajaba allí, tal como ha explicado ella misma a ElCaso.com. Fátima era muy querida y trabajaba muy bien, asegura la propietaria del Cafè de la Plaça. Su jefa no ha querido entrar a valorar el posible móvil del crimen ni la relación de la mujer con su pareja. Otras personas que la conocían coinciden en la descripción. "Una mujer trabajadora y alegre", aseguran.
El Ayuntamiento de Torroella de Montgrí ha convocado para este lunes a las siete de la tarde un minuto de silencio delante del consistorio para condenar este asesinato. El alcalde Jordi Colomí también ha anunciado que el Ayuntamiento se presentará como acusación popular en la causa para aclarar los hechos. Desde el consistorio se han puesto en contacto con el hermano de la víctima, que vive fuera, con el fin de ofrecerle apoyo en estos duros momentos.