Los Mossos d'Esquadra investigan un nuevo crimen machista en Catalunya. En este caso, en Cambrils, en Tarragona. El pasado 30 de julio apareció el cuerpo sin vida de una mujer en un piso y se cree que fue asesinada por su expareja, un hombre de nacionalidad española de unos 50 años. La chica muerta, también de nacionalidad española, tenía unos 25 años.

La policía catalana relaciona la muerte con una pelea que tuvo la mujer con su expareja, y de quien ya tenía una orden de alejamiento. Los Mossos d'Esquadra han detenido a la pareja y este martes, después de pasar a disposición del juez de violencia sobre la mujer de Reus, se ha ordenado su ingreso a prisión. Si se confirma que se trata de un caso de violencia machista, la mujer de Cambrils sería la octava víctima mortal de esta lacra en Catalunya este 2021.

Se estuvieron peleando todo el día

Según las informaciones que se recogen del auto que ha dictado el juzgado de Reus, la pelea entre el hombre y la mujer tuvo una primera parte a las doce del mediodía, en casa de ella. Después el hombre se marchó, fue al bar y después volvió, en autocar, a la casa de la mujer. Entre las cinco y las cinco y media, según los testigos, se oyeron de nuevo gritos y una pelea en el piso de la mujer, hasta que se oyó un golpe seco. Después de este hecho, el hombre se marchó de la casa, y no volvió hasta alrededor de las siete y media asegurando que su expareja "le dejó de contestar las llamadas y los whatsapps".

Aunque volvió a las ocho de la noche, hasta las ocho y media no hizo una llamada al 112, explicando que la mujer estaba tumbada en el suelo, "muy fría, azul y sin reacción".

El juez no entiende qué hizo el hombre desde la pelea hasta que llamó al 112

Aunque en un primer momento los Mossos d'Esquadra no lo trataron como un homicidio, el juez sí que ve un posible homicidio. En el auto que ordena la prisión del hombre, al cual ha tenido acceso ElCaso.com, la magistrada asegura no entender el espacio de tiempo entre las cinco de la tarde, el momento de la pelea y el golpe seco que oyen a los vecinos, hasta las ocho y media, cuando el hombre llama al 112.

El acusado, ahora arrestado y en prisión, en el inicio de su declaración, asegura que no se enfrentó con su expareja, pero en cambio no tiene ninguna explicación para las heridas que presenta la mujer en la cara. Según el informe forense, la mujer presentaba signos de estrangulamiento, si bien es cierto que no hay todavía ningún informe definitivo que asegure que fue este el motivo de la muerte.

El juez también apunta que el hombre explica al SEM que la mujer "está muerta" en varias ocasiones, incluso antes de que los sanitarios del SEM llegaran a explorarla. Creen que el hombre mató a la mujer en torno a las cinco de la tarde, se marchó, volvió y todavía esperó un rato para llamar al 112. Las pruebas forenses que se hagan, y las investigaciones en marcha, lo tendrán que aclarar.

Había agredido a la chica el día antes

Por testimonios de unas amigas de la víctima, los Mossos d'Esquadra también saben que el hombre agredió a la mujer el día antes, dándole una bofetada y causándole una herida con sangre. Por eso, por los indicios que pueda estar relacionado con la muerte de la mujer, y por haber roto la condena que tenía en vigor que no le permitía acercarse a la mujer, la magistrada ha acordado este martes el ingreso en la cárcel del hombre.

En un primer momento fue detenido por romper la condena, por haberse acercado a su expareja, pero finalmente Fiscalía y el juzgado lo han relacionado con la muerte de la chica.

La investigación sigue en marcha para aclarar los hechos

La magistrada, Maria José Nadal, sustituta de la titular del juzgado de la violencia contra la mujer de Reus, ve que el hombre puede escaparse por la falta de arraigo en Catalunya, porque no se le conoce ningún trabajo ni ningún domicilio en el que viva. Según ha podido saber ElCaso.com, los hechos pasaron en un apartamento de la zona de la Ardiaca, en Cambrils. Los vecinos aseguran que los enfrentamientos entre la pareja eran constantes y que habían generado problemas por consumo de droga y también por consumo de alcohol.

Los Mossos d'Esquadra mantienen abierta una investigación, de manera coordinada con el juzgado de Reus, para aclarar los hechos.