Àlex es un chico de 27 años de Polinyà (Barcelona) que se infectó de coronavirus en julio y, desde entonces, sufre los síntomas de la Covid persistente. En ElCaso.com, lo hemos entrevistado para que nos explique cómo ha cambiado su vida desde que se infectó.

Covid persistente en jóvenes sin patologías previas

Àlex Sánchez se infectó de coronavirus hace casi ocho meses y, desde entonces, sufre los síntomas de la Covid persistente: esto significa que, aunque ya ha superado la enfermedad, le ha dejado muchas secuelas el virus como, por ejemplo, que no ha recuperado al 100% el gusto y el olfato.

Todo empezó al principio de julio cuando fue a una reunión social con sus amigos y una de sus amigas dio positivo. Al cabo de pocos días, él empezó a tener síntomas de la Covid-19 y decidió ir a hacerse la prueba PCR y también dio positivo.

"Como no tengo patologías previas, soy una persona sana y casi nunca me pongo enfermo, me pensaba que lo pasaría como un resfriado y que en un par de semanas me recuperaría". Lo que no imaginaba el joven de 27 años era que los síntomas del virus lo seguirían acompañando durante meses.

Àlex Sánchez / Cedida

Àlex Sánchez es un joven de 27 años de Polinyà (Barcelona) y sin patologías previas que tiene Covid persistente / Cedida

Dos meses confinado en casa en verano

De hecho, se contagió el 4 de julio y hasta septiembre, no pudo salir de casa, ya que no paraba de dar positivo en las pruebas. Finalmente, después de dos meses y medio infectado y completamente aislado, por fin lo superó; aunque seguía teniendo muchos síntomas.

"Reconozco que cuando iba a tomar algo con los amigos, a veces me quitaba la mascarilla. Soy consciente de que me relajé, que pensé: esto no me pasará a mí, hasta que te pasa", comenta Àlex, que casi ocho meses después de contagiarse sigue con los síntomas.

"Es muy frustrante ver que todo el mundo se recupera y yo no"

Los primeros cinco días de infectarse, tenía síntomas leves, pero, de repente, progresivamente, fue perdiendo el olfato y el gusto: "Ponía desodorante en el cojín de la cama para ver si olía alguna cosa, pero nada de nada. A día de hoy sigo con estos síntomas. Es muy frustrante ver que todo el mundo pasa el virus en semanas y yo no", comenta Àlex.

Pero la pérdida del olfato y del gusto no son los únicos síntomas que ha experimentado Àlex: el dolor de cabeza y la febrícula le duraron prácticamente todo el verano y, de vez en cuando, cuando menos se lo espera, vuelven a aparecer: "Sigo teniendo febrícula, congestión y secuelas en general. A veces, cuando me toman la temperatura en las tiendas sale que tengo fiebre, como si estuviera enfermo, pero representa que ya no lo estoy".

Aparte de estos síntomas, desde que se contagió, Àlex empezó a tener dolores que nunca había tenido como, por ejemplo, dolor dental y explica que, aunque no se considera un síntoma de la Covid-19, sabe de casos de personas que le han caído los dientes después de contagiarse: "Yo, afortunadamente, solo he tenido sensibilidad y molestias dentales, pero no me han caído los dientes".

"El virus no se ha marchado al 100% y sigue escondido en mi cuerpo"

"El virus como tal no se me ha marchado al 100% y sigue escondido en el cuerpo. Puedo estar meses sin síntomas y, de repente, vuelven a aparecer. Nunca se me ha acabado de marchar al 100%. Así y todo, me siento afortunado, porque, a diferencia de mucha gente, no he perdido del todo el gusto y el olfato".

Àlex ha aprovechado la ocasión para pedir a los jóvenes "que tengan cabeza": "Yo también pensaba que esto era un resfriado de dos semanas. Yo soy una persona sana y nunca me pongo enfermo, pero nunca sabes cómo te puede afectar a ti", concluye el joven de 27 años.