La Guardia Civil ha detenido a un hombre que, tras dejar morir a su madre, una mujer de edad avanzada, ha estado conviviendo con el cadáver durante días hasta que todo ha acabado saliendo a la luz. Los hechos han tenido lugar en la localidad de Infiesto, en Asturias, y fue el mismo detenido quien el día de Navidad llamó al centro sanitario de la población pidiendo ayuda para su madre. Un médico y una enfermera se desplazaron hasta el inmueble, pero ya no pudieron hacer nada para salvar la vida de la mujer. De hecho, había signos evidentes que apuntaban a que ya llevaba días muerta. 

El hijo agrede a los sanitarios y acaba detenido

Cuando los sanitarios le explicaron al hijo que su madre ya llevaba varios días muerta, este se volvió muy agresivo y comenzó a gritarles y golpearles, hasta el punto que dejó al médico encerrado en una de las habitaciones de la vivienda. La enfermera, sin embargo, consiguió escapar y alertó a la Guardia Civil, que se desplazó hasta el domicilio. Los agentes redujeron al hijo y lo detuvieron como presunto autor de un delito de atentado contra un agente de la autoridad por la agresión a los sanitarios.

Paralelamente, se abrió una investigación con el fin de esclarecer las circunstancias de la muerte de la anciana. El cuerpo fue trasladado al anatómico forense para que se le practique la autopsia y se determinen las causas de la muerte, que a estas alturas apuntan a causas naturales. Aun así, los investigadores de la Policía Judicial, tras inspeccionar la vivienda, comprobaron cómo la mujer vivía en un completo estado de abandono hasta que acabó muriendo. Por ello, sumado al hecho de que tardó varios días en alertar de la muerte de su madre, el hijo también está acusado de un delito de abandono de obligaciones familiares. Tras ser puesto a disposición judicial, ha quedado en libertad con medidas cautelares.