Hace tan solo cinco días, los vecinos de Lleida creían que ya podían respirar tranquilos después de que se detuviera la responsable de haber incendiado 17 contenedores en tan solo tres días. Por desgracia, aunque se dejara fuera de juego la autora de aquellos hechos, de forma temporal, ya que el sábado volvió a quedar en libertad, la quema de contenedores no ha parado. La Guardia Urbana de Lleida ha detenido este martes por la noche, poco después de las nueve, un hombre de 46 años, vecino del municipio, que ha quemado, de forma total o parcial, seis contenedores de basura.
Los hechos tuvieron lugar durante la noche y la madrugada del lunes. Hacia las doce menos veinte, la Guardia Urbana recibió un aviso de un contenedor que estaba quemando a la altura del número 37 de la calle Príncep de Viana. Pocos minutos después, también se prendió fuego a otro contenedor la misma calle, a pocos metros de distancia. Insatisfecho después del doble incendio, el hombre siguió hasta la rambla de Ferran y, a la altura del número 54, quemó otro contenedor. Ante estos hechos, la Guardia Urbana inició una investigación que se pudo cerrar rápidamente, en menos de 24 horas. Gracias a la colaboración ciudadana y las imágenes que los vecinos aportaron, los policías pudieron identificar al responsable de los incendios y, este martes, poco después de las nueve de la noche, pudieron localizar y detener al autor de los hechos en la calle Príncep de Viana.
En libertad después de quemar diecisiete contenedores
Hace tan solo cinco días que en el municipio se detuvo una vecina de 32 años por los mismos hechos, todo y que en una escala mayor. En tres días, la mujer quemó diecisiete contenedores, y obligó a la Guardia Urbana y a los Mossos d'Esquadra a colaborar en un operativo que se alargó durante varias noches hasta que la atraparon. Una captura con regusto agridulce, ya que, si bien la capturaron, quedó en libertad después de pasar por los juzgados, por lo tanto, todo indica que el nuevo detenido tendrá una trayectoria similar y volverá a estar en la calle en muy poco tiempo.