Un total de 25 años entre rejas para J.A.E.M., el hombre que en 2021 mató a puñaladas a la abuela Margarita dentro de su casa, en Calella (Barcelona). El condenado, de nacionalidad española, estaba fugado de la prisión de Quatre Camins cuando cometió el crimen y la Audiencia de Barcelona considera probado que entró en el domicilio de la víctima, de 96 años, le asestó una primera puñalada antes de dejarla atada en una silla del comedor mientras él registraba el resto de la vivienda, hasta que la mujer se levantó para intentar escapar y, entonces, le clavó trece puñaladas más hasta matarla.
El hombre abandonó el lugar con un móvil, un reloj y un puñado de joyas, un botín habitual para él, ya que cumplía condena en la prisión de La Roca del Vallès por varios robos con violencia. La sentencia considera al hombre culpable de los delitos de asesinato con alevosía y robo con violencia, con la agravante de reincidencia. Aparte de los 25 años de privación de libertad, tiene prohibido acercarse a menos de mil metros a los dos hijos y a los cuatro nietos de Margarita, con los que tampoco puede ponerse en contacto. Además, deberá indemnizar a los hijos con 200.000 euros por cabeza y 100.000 euros para cada uno de los nietos.
El crimen de la Margarita
La abuela Margarita vivía sola en una casa de la calle de la Església de Calella. Sus hijos fueron quienes avisaron a la Policía Local tras no poder ponerse en contacto con ella. Los agentes la encontraron, ya sin vida, el día 7 de febrero de 2021. El hombre que la mató aprovechó que Margarita, una mujer muy conocida y querida en el pueblo, tenía la puerta de su casa abierta, ya que estaba fuera mirando a la gente pasar. El condenado se acercó a ella con un cuchillo, que no dudó en usar cuando la víctima intentó escapar por el pasillo.
Posteriormente, la dejó atada a una silla mientras buscaba objetos de valor. Cuando la mujer, ya malherida, intentó levantarse, se abalanzó sobre ella y le asestó más de una decena de puñaladas en la parte izquierda del cuerpo, provocando su muerte. Los Mossos d'Esquadra pudieron detener al principal sospechoso un año después. Ahora, ingresará en prisión durante los próximos 25 años.
