La Policía Local de Martorell y los Mossos d'Esquadra han clausurado este lunes el Hostal Sant Joan de Martorell después de confirmar que servía a delincuentes para esconderse de la policía y evitar ser detenidos. En una inspección conjunta de los dos cuerpos policiales, con la participación de agentes de la Unidad de Seguridad Ciudadana de la comisaría de Martorell y de la Unidad Regional de Policía Administrativa (URPA) de los Mossos, se accedió al establecimiento hotelero después de saber que no cumplía con los requisitos administrativos y que en días anteriores había entorpecido una actuación policial de búsqueda de una persona pendiente de detención.
En la entrada administrativa al hostal del barrio de Can Carreres, se confirmaron los hechos, según ha podido saber ElCaso.com, y se verificó que los responsables del hotel no cumplían con la implementación del registro de viajeros, se habían realizado reformas relevantes sin ninguna comunicación municipal y el establecimiento se encontraba en un estado de insalubridad, entre otras infracciones administrativas menores.
El hostal, clausurado
Los técnicos municipales ordenaron el precinto del hostal, con capacidad para 33 personas, y su clausura. El registro de clientes no solo es obligatorio, sino que también es clave, a nivel policial, para poder identificar personas buscadas por la justicia. Algunos locales evitan este registro para no comprometer a sus clientes, aunque es obligatorio notificarlo a las autoridades.
En el interior del local, los Mossos d'Esquadra identificaron a un hombre del año 1998, de nacionalidad marroquí, que estaba fugado de la justicia y que tenía pendiente una orden de entrada en prisión emitida por un juzgado. Al ser localizado, fue detenido y entregado al juzgado de guardia, que gestionó su ingreso a prisión.