Este viernes, si el Tribunal Superior de Justícia de Catalunya (TSJC) no dice lo contrario, los bares y restaurantes de Catalunya no podrán subir sus persianas por la entrada en vigor de las nuevas medidas para luchar contra el repunte de contagios de la Covid-19. Es por ello que desde ElCaso.com hemos decidido salir a la calle a ver cómo se están viviendo en las terrazas de los locales de Barcelona las horas previas al cierre. Y el resultado ha sido realmente desesperanzador.
Una terraza de un bar del centro de Barcelona, lleno de gente pocas horas antes del cierre / Marc Ortín
Sin distancia de seguridad y en grupos de más de seis personas
A pesar de los avisos constantes sobre el enorme riesgo por la gran cantidad de contagiados asintomáticos que hay, la gente sigue compartiendo las mesas de las terrazas con amigos sin mantener la distancia de seguridad y sin mascarillas, como si el simple hecho de estar sentado en una silla evite cualquier tipo de riesgo de contraer el virus.
Además, en muchas ocasiones se juntan mesas de más de seis personas, el grupo máximo permitido para intentar bajar la cadencia de contagios.
Fumando sin distancias y con todo el mundo sin mascarilla
Por otro lado, a pesar de las recomendaciones del Ministerio de Sanidad de intentar fumar alejado de la gente por el riesgo a que el virus circule con el humo, la gente sigue fumando en las terrazas sin mantener la distancia de seguridad de dos metros, lo que se une que al sentarse en una terraza todo el mundo se quita la mascarilla.
Un hombre fumando en la calle con la mascarilla bajada / EFE
Canarias, la primera en prohibir fumar por la calle
Hay que recordar que el gobierno de Canarias prohibió hace una semana fumar en la calle mientras se camina, al considerar que es imposible garantizar el cumplimiento de la distancia de seguridad en estas situaciones, ya que el viento puede mover el humo a diferentes distancias.